
La Xunta colaborará con los criadores para que la única raza de perro autóctona asuma labores de rescate y en la policía
04 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Sabido era que el can de palleiro, la única raza autóctona de Galicia, cumplía de forma magnífica como perro pastor, pues es muy habilidoso en la tarea de arrear, conducir y guardar las vacas o en proteger la casa y los establos. Pero los criadores están comprobando que tiene unas excelentes cualidades para asumir muchas más funciones, como las de perro guía, labores de rescate en catástrofes, detector de drogas o de apoyo a determinadas actuaciones policiales y del Ejército. Así que la Xunta ha decidido llamar a filas al pastor gallego para promocionar y buscarle nuevas ocupaciones a una raza que, hace solo unos años, estuvo al borde de la extinción.
El propio presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, no dudó ayer en cantar las excelencias del pastor gallego tras la reunión del Consello en la que se aprobó la firma de un convenio con el Club Can de Palleiro para difundir esta raza autóctona.
«Se alguén quer comprar un can, esta raza pode ser interesante, alomenos é a miña experiencia persoal», destacó el mandatario autonómico, que se detiene a verlos todos los años en la feria de Silleda y está valorando en hacerse con un ejemplar.
Cariñoso como el labrador, inteligente como el border collie y prácticamente igual de fuerte que el pastor alemán, el can de palleiro está ahora mismo en progresión en Galicia, pues pasó de los 400 ejemplares inscritos en el año 2012 a los cerca de mil que hay en la actualidad. La lista de espera para poder hacerse con un ejemplar con pedigrí es también considerable. Depende de las camadas.
Una ayuda de 20.000 euros
A través del convenio que firmará la Consellería de Medio Rural con el club que agrupa a los criadores, al que se aporta la cantidad simbólica de 20.000 euros para los próximos años, se trabajará más intensamente en la recuperación de la especie, en la definición de los prototipos y en la búsqueda de nuevas funciones para dar a un perro que tradicionalmente estuvo ligado a los hábitos de vida rurales.
El objetivo de esta iniciativa es prestigiar la única raza canina de cuño gallego y incorporarla a las labores más cualificadas que se le reservan al animal en las unidades policiales o de rescate. Cualquier perro puede llegar a ser el mejor amigo del hombre. O de la mujer. También puede llegar a ser un agente de élite. Pero pocos pueden ser tan riquiños como el palleiro galaico.
Un gran rastreador que llegó de Centroeuropa
Llegó de Centroeuropa con los pueblos que conquistaron Galicia y acabó quedándose. Lo hizo como perro de trabajo en las granjas. Al igual que el pastor belga o el alemán, el can de palleiro es un animal acostumbrado al manejo de rebaños. Aún ahora es usado para ello en algunas explotaciones ganaderas. Movimientos rápidos combinados con una musculatura fuerte lo hacen perfecto para guiar reses grandes como las vacas. Pero los expertos creen que vale para mucho más.
De hecho, dicen desde el club que promueve la raza en Galicia, que por su morfología fue usado para el pastoreo del ganado vacuno. Pero es verdad que, como añaden, «puede que no sea el primero en nada, pero es el segundo en todo». Es por eso que es un animal tan polivalente que, como sus primos belgas o alemanes, puede ser usado perfectamente para ejercer de agente para atrapar a los malos como el famoso Rex.
No solo avalan sus méritos los criadores. La veterinaria y diplomada europea en Etología, Ángela González, apunta que, efectivamente, esta es una raza perfecta para el rastreo. Por eso, dice, «podría trabajar en la búsqueda de personas o detectando drogas o explosivos».
No obstante, matiza que, como en cualquier raza, «cada perro es diferente y también es labor del adiestrador saber reconocer cuándo un ejemplar está más dotado que otro para desarrollar una determinada función». Porque no hay que generalizar.
Aunque es un perro territorial, es también muy familiar. Adora a sus dueños, juega y cuida de los niños, algo que lo hace perfecto como perro de compañía. Es valiente, no da confianza a los extraños. De ahí sus dotes para ser guardián. Pero como buen can que ha sabido adaptarse y sobrevivir a la mezcla, el palleiro está para lo que le echen. Bueno es él. ¿O no?.