La escasez de fármacos en Galicia causa graves problemas en los tratamientos

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO

SOCIEDAD

Imagen de archivo de medicamentos.
Imagen de archivo de medicamentos. Santi M. Amil

En el 2018 hubo 1.332 medicamentos con problemas de suministro y el 16 % generaron problemas asistenciales importantes

26 abr 2019 . Actualizado a las 19:57 h.

Por primera vez, en el mes de noviembre la Agencia Española de Medicamentos (AEMPS) realizó un informe sobre un problema que no solo va en aumento sino que parece no tener solución, el desabastecimiento de fármacos. Ahora acaba de dar a conocer el balance de todo el año 2018, y los datos demuestran que la falta de suministro crea cada vez mayores complicaciones a pacientes, farmacias y personal sanitario. 

Porque el año pasado hubo 1.332 medicamentos con problemas, el doble que en el 2015, cuando rondaron los 700. En el segundo semestre la cifra creció un 28 % en relación a los seis primeros meses. Si hay un nombre a destacar ese es el del valsartán, para la hipertensión, que ha provocado la ausencia de más de cien presentaciones de medicamentos o el de Apocard, la marca comercial que más se utiliza para las arritmias, lo que obligó a prescribir alternativas. Los laboratorios no fueron capaces de cubrir este aumento de la demanda por lo que la AEMPS ha tenido que recurrir al extranjero y a frenar exportaciones con este principio. 

Pero los problemas más destacados por la agencia no solo se refieren a un medicamento para el corazón sino a varios antineoplásicos, como el BCG, para el cáncer de vejiga; la fludarabina para un tipo de leucemia y para el trasplante de médula ósea; o la daunoblastina, también para dos tipos de leucemia. En estos casos hubo que recurrir al extranjero para que los enfermos no se quedasen sin este fármaco, y aún así fue muy complicado lograrlos. 

El exhaustivo estudio de la AEMPS recoge incluso el impacto asistencial de esta falta de productos sanitarios. En el 16 % de los casos fue importante, ya que obligó al paciente a acudir a su médico para que le prescribiese una alternativa o incluso -en el 10 % de los desabastecimientos- a ir más allá al no existir ninguna opción sustituible. 

Las causas de estos suministros irregulares son en el 50 % de los casos los problemas de capacidad de las fábricas o las complicaciones en la fabricación. Por ejemplo un aumento de la demanda que las empresas son incapaces de asumir o la remodelación de una instalación. En uno de cada diez desabastecimientos el motivo fue la dificultad para conseguir el principio activo.

Sistema cardiovascular y nervioso

Los grupos terapéuticos que registraron más incidencias fueron los dirigidos a enfermedades del sistema cardiovascular, del sistema nervioso, antiinfecciosos y agentes antineoplásicos. Esta situación ha obligado al Gobierno central a recurrir al extranjero en 39 ocasiones, a hacer una comercialización excepcional en 121 y a controlar la distribución en otro centenar. La agencia admite que en el 2018 ha habido un incremento «muy importante» en la notificación de problemas de suministro, que solo en parte está justificado por las retiradas de medicamentos de valsartán. Por ello ha elaborado un plan estratégico hasta el 2022 con medidas que ayuden a garantizar el abastecimiento.