Einstein gana otra vez

Borja Tosar ASTROFÍSICO Y DIVULGADOR

SOCIEDAD

Una mirada más profunda a la imagen muestra la luz cayéndose dentro de un pozo de gravedad

11 abr 2019 . Actualizado a las 11:26 h.

Sabíamos que estaban ahí, pululando en el espacio interestelar, los más grandes en el centro de las galaxias, pero ayer por primera vez pudimos ver uno en una fotografía.

El camino hasta esta imagen ha sido largo y complicado. Antes de las teorías de Einstein se jugaba matemáticamente con la posibilidad de que existieran objetos supermasivos procedentes del colapso de estrellas moribundas, agujeros en el espacio interestelar con una gravedad extrema, pero no fue hasta la llegada de las ecuaciones de Albert Einstein cuando se volvieron «negros».

Una de las consecuencias de la teoría de la relatividad general es que la luz se ve afectada por la gravedad. Es decir, la luz cae hacia el centro de los objetos masivos como cualquier objeto material, como un lápiz lo hace en la Tierra, por ejemplo.

Otra parte de la relatividad determina que nada en el universo puede ir más rápido que la velocidad de la luz. Se trata de una ley física inviolable. Combinando las dos ideas podemos preguntar ¿Existe un objeto con tanta gravedad que la luz caiga y no pueda salir? Lo hay, un agujero negro.

En un primer vistazo en la fotografía divulgada por el consorcio del Telescopio del Horizonte de Sucesos (EHT) podemos ver un plátano luminoso, pero le pedimos que vuelva a mirar. Es luz curvándose y cayendo dentro de un pozo de gravedad, se ve más brillante por un lado debido a que en este caso el agujero esta en rotación y arrastra la luz alrededor de sí mismo, devolviendo más rayos de luz por un lado que por otro.

Uno de los objetivos del Event Horizon Telescope era desafiar la teoría de la relatividad formulada por Albert Einsten hace algo más de cien años, haciendo simulaciones con sus ecuaciones obtuvieron una imagen simulada de cómo se vería el agujero negro. Si la imagen observada por los telescopios fuera la misma, se confirmaría de nuevo, si no, habría que pensar en corregirla.

La imagen que se divulgó ayer al mundo no solo es la foto de un objeto infotografiable, se trata de una nueva confirmación de la teorías de Einstein, pese a que el mismo genio no creyera que podía haber un objeto tan exótico en el universo.