La presentadora ya está en casa tras ser operada con éxito de un cáncer de ovario
28 may 2019 . Actualizado a las 19:09 h.Sara Carbonero recibió ayer el alta hospitalaria tras ser operada con éxito de un tumor maligno en el ovario en la clínica Rúber Internacional de Madrid. Ayer estaba previsto que la mujer de Iker Casillas volviese a casa y parece que finalmente así ha sido, a juzgar por un mensaje que la propia presentadora colgó en su cuenta de Instagram.
«Ya en casa y todo en orden. Muchísimas gracias por todas las muestras de cariño que he recibido estos días. Me encantaría responder una por una pero es imposible. Ahora toca ponerse fuerte y seguir. Gracias a todos de corazón», expresaba la presentadora de televisión. De momento se desconoce qué tratamiento tendrá que seguir la presentadora tras su regreso al hogar, pero lo habitual en estos casos, según los expertos, es tener que recibir quimioterapia.
Ha pasado apenas una semana desde que Sara Carbonero quiso hacer público que sufría un tumor de ovario y que deberá pasar por quirófano. Si la pareja se estaba recuperando tras el infarto del futbolista, este mazazo a la periodista ha sido la gota que colma el vaso. Tras someterse a la intervención quirúrgica para la extirpación del tumor maligno de ovario, la periodista no ha parado de recibir visitas de sus compañeros de profesión y sus familiares. Matías Prats, el hijo del periodista de Antena 3, quiso ayer mostrar su apoyo a la mujer de Iker Casillas tras varios años compartiendo el mismo plató de informativos. También, Isabel Jiménez, visitó una vez más a su íntima amiga y co-fundadora de Slow Love, proyecto profesional de Sara Carbonero, Mayra del Pilar e Isabel Jiménez. Además, Irene Carbonero, un día más, no ha querido separarse de su hermana desde que ingresó en el hospital. Por tanto, Irene se convierte en el mayor apoyo de la periodista junto a su marido, Iker Casillas.
El exfutbolista del Real Madrid, al igual que su cuñada, intenta no separase de la madre de sus hijos en estos duros momentos. Aunque no puede ir a verla todo lo que quisiera debido a que debe guardar reposo después de su infarto, pero el amor da fuerzas a cualquiera. El futbolista del equipo portugués se escapó un momento de la clínica para ver el último partido del Oporto FC contra el Sporting de Lisboa. Mientras contemplaba el partido, el futbolista Tiquinho Soares se sacó la camiseta del portero español cuando metió un gol. Este homenaje emocionó a Iker Casillas tanto que no pudo contener las lágrimas.