Fijarse en el descanso de los animales podría servir para escoger la mejor posición para un adecuado descanso si sufres del estómago
18 jun 2019 . Actualizado a las 10:38 h.Esta pasada noche mi esposa y mi hija me deleitaron con un concierto de zumbidos y ronquidos consecuencia del cual surge esta reflexión. Porque en ese estado de obligado insomnio no podía dejar de pensar en lo afortunadas que son ambas por su capacidad para dormir como marmotas. Pero ¿realmente duermen, dormimos -los seres humanos, al menos algunos privilegiados- como marmotas o como lirones?
Tanto marmotas como lirones se clasifican dentro del orden de los roedores. Las primeras de un tamaño considerable -alcanzan el medio metro de longitud y superan con creces los 5 kilogramos-; y los segundos mucho más pequeños -rondan los 20 centímetros, cola incluida y los 200 gramos-. Una aclaración necesaria por cuanto la postura de descanso o sueño que adoptan los diferentes animales depende principalmente de dos factores: su tamaño y/o volumen; y de si tienen una digestión más o menos pesada.
En lo tocante a esto último, los rumiantes tienden a descansar en una postura que permita a su estómago mantener la posición «natural» o habitual, a fin de que la acción de la gravedad facilite su pesada digestión. Es por ello que suelen descansar, boca abajo, apoyados sobre su pecho y sus patas flexionadas; no de lado.
No obstante, un reciente estudio ha puesto de manifiesto que todavía tiene más peso o influencia en la posición adoptada para dormir el tamaño corporal. Así, los animales pequeños tienden a dormir boca abajo, apoyados en el pecho. Mientras que los más grandes y voluminosos prefieren descansar yaciendo sobre un costado, de lado, lo que permite una posición más cómoda y relajada de las patas.
Al respecto de los roedores, aunque lo apuntado hasta aquí sugiere que descansan boca abajo -como mi esposa-; muchos alternan esta postura con un sueño ligero sentados sobre las patas traseras. Lo que a efectos humanos vendría a ser una reparadora cabezadita en la silla o el sofá.
Como curiosidad, cabe destacar que el único animal que ha sido observado durmiendo boca arriba -la postura que suele adoptar mi hija- es el canguro rojo.
La explicación previa además de permitir averiguar con qué animal te identificas a la hora de dormir, también debería servirte para escoger la mejor posición para un adecuado descanso si sufres del estómago.