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La mujer mantuvo en secreto que el verdadero padre era un compañero de trabajo
29 jul 2019 . Actualizado a las 19:17 h.La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a una mujer a indemnizar a su exmarido con más de 60.000 euros por ocultarle durante tres años que el verdadero padre de su hija era un compañero de trabajo. En la sentencia, que todavía es recurrible, se detalla que la mujer omitió esta información pese a que sabía que su compañero de trabajo se había hecho una prueba de paternidad años antes.
Como explica la demanda recogida por Cadena Ser, ambos involucrados fueron novios entre 2003 y 2007, pero retomaron su relación en marzo de 2009, cuando el hombre salió del seminario, manteniendo entonces una «relación de castidad». Aunque solo mantuvieron una única relación sexual «no completa, sin penetración», la niña nació en agosto de 2010, entre nueve y diez meses después.
Según el relato judicial, la mujer mantuvo una relación esporádica paralela con un compañero de trabajo hasta que en 2011 conoció la verdadera paternidad de su hija, hecho que no comunicó al demandante hasta 2013.
La Audiencia de Madrid decide que la mujer debe indemnizar a su exmarido con más de 62.000 euros por ocultar durante años la verdadera paternidad de la niña: «allí donde un juzgado entendió que «no hubo ocultación maliciosa», la Audiencia explica que «por no haber comunicado las dudas sobre la paternidad ni en el momento de conocer que estaba embarazada, ni posteriormente» en 2011 tras conocer los resultados de las pruebas existe «un comportamiento o conducta culposa que ha generado causalmente un daño derivado de esa ocultación», explica la información de la Cadena Ser.
La sentencia de la magistrada Milagros del Saz cita a la reciente jurisprudencia del Tribunal Supremo relacionada con este caso. El tribunal explicó en 2018 que estos casos pueden dar lugar a "un juicio de moralidad indudablemente complejo" pero negando que "este daño sea indemnizable mediante el ejercicio de las acciones propias de la responsabilidad civil".