Ana Obregón sobre la lucha contra el cáncer de Álex Lequio: «Es un campeón»
SOCIEDAD
La presentadora recordó que fue durante la grabación de «¿Qué apostamos?» cuando se enteró de que era «la cornuda nacional»
01 oct 2019 . Actualizado a las 12:34 h.Ana Obregón fue una de las invitadas en el segundo programa Un año de tu vida, que presenta Toñi Moreno en Canal Sur. Junto a Mayra Gómez Kemp, la actriz y presentadora repasó sus años dedicados al espacio ¿Qué apostamos?, una época en la que recuerda que trabajaba catorce horas diarias. Obregón aseguró que «he trabajado así toda mi vida y toda la infancia de Álex, a lo mejor no he podido atender al novio o la pareja, pero mi hijo nunca ha estado mal atendido, a mi hijo no le ha faltado de nada», respondía sobre cómo había sido capaz de conciliar vida laboral y familiar.
Muy emocionada, como ha ocurrido en las últimas ocasiones que ha acudido a platós de televisión, Ana Obregón solo ha tenido palabras de cariño para su hijo Álex, que ha sufrido recientemente una recaída del cáncer que sufre y ha tenido que volver a ser ingresado en el hospital. «Ser madre es el mejor papel de la vida de cada mujer. Lo mejor que he hecho es este hijo que he tenido, que es un luchador, un campeón. No me he sacrificado: por un hijo no te sacrificas. Por un hijo lo haces lo que sea porque te sale. Yo soy madre soltera y muy orgullosa. He hecho de madre, de padre y se puede. Son los hijos los que te dan la fuerza», aseguraba.
Pero no todo fue hablar de la enfermedad de Álex Lequio, Ana Obregón también aprovechó para recordar una anéctoda de su vida personal: «Con Ramontxu en Qué apostamos me enteré que el padre de mi hijo había salido con otra mujer. Yo era la cornuda nacional…».
La recaída de Álex Lequio
Álex Lequio confirmaba en ¡Hola! que en una de sus revisiones había surgido un contratiempo en su lucha contra el cáncer. Sin ahondar en más detalles, tanto su madre como su padre Alessandro Lequio están a su lado acompañándolo, como ya ocurrió en marzo del 2018, cuando la familia se desplazó a un prestigioso hospital en Nueva York para que recibiese tratamiento.
La última foto que colgaba Ana Obregón de los dos juntos eran a las puertas del Ábac, el restaurante de Jordi Cruz en Barcelona. «‘Comer de cine.´ Nunca le encontré el sentido a esta frase. Hasta hace 2 días @abachotelrestaurant Admiración absoluta por @jordicruzoficial ( a pesar de lo duro que es como juez).Pensaba que el arte no se servía en la mesa pero ya veo que la creatividad no tiene límites. En fin, de oscar. O un par de ellos. Mejor dicho, de todos», escribía.
La trágica noticia se conocía a finales de marzo del 2018, cuando la revista Diez Minutos publicaba unas fotografías de Álex Lequio, junto a su novia de entonces, su madre y su padre entrando en un hospital de Nueva York especializado en el tratamiento de cáncer, el Memorial Sloan Kettering Cancer Center. Durante meses, lo que le sucedía a Álex Lequio estuvo rodeado de un gran secretismo. «No voy a hablar. Lo estamos llevando todo en silencio», declaraba en aquel momento el joven a El Español.
Fue en un acto en el que en un principio se habló de que Álex Lequio podría asistir, ya que lo organizaba su empresa, cuando su padre, Alessandro Lequio, puso nombre a la enfermedad que sufría y explicaba además los motivos por los que habían tomado la decisión de que se tratase de la enfermedad en Estados Unidos. «Por su edad, hemos preferido que esté en las mejores manos y las mejores manos encima son las de un español, Josep Baselga. Y es algo que debería llenarnos a todos de orgullo», aseguraba. «El cáncer es un tratamiento largo y penoso en el que no hay novedades ni evolución hasta que todo termina. Es una enfermedad larga y dura», terminaba.
Se terminaban así meses de total hermetismo entorno a la salud del joven que en octubre reaparecía en público muy animado y optimista, algo que ha seguido haciendo desde entonces. «Muchas gracias por venir. Estoy muy agradecido por todo el apoyo. Y nada... ánimo a todos los luchadores. Gracias de corazón», aseguraba. «No hay que dramatizar», declaraba en una entrevista en la revista ¡Hola! hace unos meses. «El cáncer no es sinonimo de fatalismo y muerte, sino al revés: es sinónimo de vida», añadía. Incluso bromeaba con su cambio físico: «A mí, mirarme al espejo y parecer un reptil me hace gracia. Pero entiendo que haya gente que igual ese cambio físico le pueda impactar».
También su madre, Ana Obregón, que lo dejó todo para acompañar a su hijo en tan duro trance, ha hablado abiertamente de cómo afrontan la enfermedad. «Cuando el médico me dice "su hijo tiene un tumor", es como si se hubiera bajado de repente el telón de mi vida», explicaba en ¡Hola!. «Me pasé toda la noche llorando sentada al lado de mi hijo dormido», explicaba. Y tres días después se confirmaba el fatal diagnóstico: «Era maligno y, además, de un tipo del que había muy pocos casos en el mundo. Desde ese momento supe que yo ya no podía desmoronarme». La bióloga y presentadora fue muy clara en cómo habían afrontado la enfermedad: «Mi hijo llegó a preguntarme si se iba a morir», confesaba en Volverte a ver, el programa que presenta Carlos Sobera en Telecinco.
El pasado mes de junio era el propio Álex Lequio el que explicaba que no podía asistir a un evento que tenía programado porque estaba en el hospital por un «susto».