La «influencer», mujer del líder de Vox, confiesa que no pudo obtener la imagen que ansiaba
13 nov 2019 . Actualizado a las 18:35 h.Lidia Bedman, la esposa de Santiago Abascal, fue una de las protagonistas del desfile del Día de la Hispanidad y de la recepción posterior en el Palacio Real. No asistió Malú, la pareja de Albert Rivera, pero la instagramer y mujer del líder de Vox sí debutó en este tipo de actos oficiales. La influencer mostró su satisfacción por haber acudido a las celebraciones de la jornada del sábado, pero también confesó en su cuenta de Instagram que se le ha quedado clavada una espinita: no tener una fotografía saludando a Felipe VI y a la reina Letizia. El problema, haber sido eclipsada por su marido en ese momento. La propia Bedman lo explicaba en su mensaje. «Hoy ha sido todo un orgullo como española poder saludar en el Palacio Real a los Reyes de España en el día de la Hispanidad. ¡Viva! Me hubiese gustado tener una foto del saludo pero mi marido es tan grande que me ha tapado #12oct #fiestaNacional #diadelahispanidad», apuntaba.
Bedman lució durante los actos de la Fiesta Nacional un conjunto granate (o marsala, como diría algún que otro estilista) de la firma Cherubina. Eligió un look con apariencia de vestido pero compuesto por un top de manga larga, escote de pico y fruncido en la zona de los hombros y una falda lápiz con botonadura dorada. Muchos compararon su modelo con el de Manuela Villena, la esposa del presidente andaluz Juan Manuel Moreno Bonilla. Villena optó por un diseño de la marca Vogana, de su tierra, en color burdeos, que obtuvo buenas críticas en el ránking del Día de la Hispanidad y que logró robarle protagonismo a otros invitados.
Había expectación sobre la asistencia de Bedman a las celebraciones del sábado, ya que, aunque comparte numerosas imágenes en su cuenta de Instagram, no se prodiga en la publicación de fotos en las que aparece junto a su marido. Además, es una apasionada de la moda y sabía que su look iba a ser mirado con lupa, sobre todo al participar en un acto institucional en el que tiene que aparcar el estilo desenfadado que luce en otras ocasiones.
La alicantina, de 33 años es la segunda esposa de Santiago Abascal y madre de dos de los cuatro hijos del candidato por Vox. Es licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas por la universidad San Pablo CEU. En el 2015 se presentó a la Asamblea de Madrid en las listas de la formación verde. No solía acudir a actos políticos en los últimos tiempos, pero recientemente asistió al mitin de Vistalegre con sus dos niños para apoyar a su pareja. Además, acaba de publicar por primera vez en Instagram imágenes y comentarios en los que defiende las ideas de la formación de Abascal. Acostumbrada a mantenerse en un segundo plano, esta vez, al menos en el Palacio Real, le ha pesado quedarse detrás de Abascal.