La Agencia de Protección de Datos ha creado un canal urgente para retirar contenidos digitales de carácter sexual o violento, tras el suicidio de una mujer al difundirse un vídeo suyo
09 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Mar España Martí está al frente de la Agencia Española de Protección de Datos. En septiembre crearon un canal prioritario para evitar las terribles consecuencias que pueden sufrir las víctimas de la difusión de vídeos sexuales o violentos sin permiso.
-¿Cómo actúa el canal?
-Es una iniciativa pionera, lo lanzamos en septiembre pero como hemos recibido pocas reclamaciones creemos que mucha gente no lo conoce, así que estaos lanzando una campaña a nivel estatal. Este canal surge para proteger casos graves, urgentes y prioritarios de violencia digital, que pueden suponer hasta un suicidio como ocurrió con la trabajadora de Iveco. Fue a raíz se ese caso cuando empezamos a pensar en cómo ayudar. El canal sirve para retirar contenidos de carácter sexual o violento, por ejemplo una paliza o menor, o en los que se humilla a o ridiculiza a una persona. El otro día, por ejemplo, nos llegó un caso de un señor borracho al que grabaron y difundieron el vídeo por todo el pueblo. Cuando nos llega una denuncia de este tipo, que en el caso de que proceda de un menor de edad no hace falta ni que se identifique, la admitimos de forma prioritaria y en 24 horas sale el requerimiento para retirar los contenidos. Eso sí, nos tienen que decir qué contenidos son y en dónde están.
-¿Qué plazo da la agencia para que se retiren los contenidos?
-Hasta ahora hemos lanzado 18 órdenes de requerimiento de retirada de contenidos, y el cien por cien se han retirado de Internet, algunos en diez minutos, otros en 24 horas y otros en 72. Personas afectadas nos están diciendo que les hemos devuelto las ganas de volver a vivir. De momento solo nos han llegado 18 porque creo que no se conoce bien el canal, pero hay que insistir que en el caso de los menores incluso nos pueden mandar los vídeos sin que se identifiquen, y los datos se guardan con absoluta confidencialidad.
-¿Sigue habiendo desconocimiento a la gravedad que supone difundir este tipo de contenidos?
-Mucho, aunque los jóvenes son nativos digitales y los adultos nos hemos acostumbrados, no somos conscientes de que reenviar un vídeo sexual de una compañera de trabajo acarrea responsabilidad civil, disciplinaria, y te puede caer una multa por protección de datos. Es algo tan fácil como que no hagas lo que no te gustaría que te hicieran. La familia de la mujer de Iveco no se va a recuperar en la vida.
-Hace unos días se dio a conocer la sentencia de dos años de cárcel para un hombre que difundió imágenes de la víctima de la Manada. ¿Son necesarias sentencias así?
-Por supuesto, nosotros también abrimos un procedimiento sancionador por 150.000 euros a los violadores de la Manada por grabar y difundir la violación, y a un medio de comunicación por dar datos de la identidad de la víctima. En estas situaciones actuamos de oficio, cuando nos enteramos de algún caso grave en los medios de comunicación.
-¿Cuántas denuncias reciben al año? ¿Y las sanciones, son muy altas?
-Al año recibimos unas 14.500, la mayoría de usuarios particulares y en algún caso de asociaciones, pero más del 90 % de las reclamaciones son de usuarios. Hemos tenido un incremento de un 33 % desde que el reglamento fue directamente aplicado en mayo del 2018.
-¿Los sectores más demandados?
-Hay temas muy graves, como la inclusión en un fichero de morosos por tener un dato erróneo de una deuda, lo que impide al ciudadano que le den una hipoteca. Hay muchas reclamaciones del sector de las telecomunicaciones, no porque sea donde peor se hace el tratamiento de datos sino porque es uno de los sectores en donde el consumidor esta más habituado a presentar reclamaciones, y también de entidades financieras...
-¿Cuál ha sido la multa más alta que ha puesto la agencia?
-Hace poco pusimos 150.000 euros de sanción a la Liga Profesional de Fútbol, por un tratamiento indebido de datos en una app suya. Y a Facebook, con el anterior reglamento, 1,2 millones antes de que estallara el escándalo de Cambridge Analytica por su política de privacidad. Ahora va a haber sanciones mucho más importantes, que aún no puedo decir porque no es firme el procedimiento sancionador.
-¿Cómo responden las grandes multinacionales, como Facebook, a este tipo de sanciones?
-Son empresas que tienen medios potentes y normalmente las recurren en la vía contenciosa, por lo que es la Audiencia quién resuelve.
-¿Firmamos consentimientos con demasiada ligereza?
-Seguramente nos descargamos apps sin mirar lo que hay detrás. Hay que tener en cuenta que muchas tienen acceso a nuestras cámaras de fotos y a veces no somos conscientes de los permisos que damos, porque la gente puede guardar en el móvil fotos íntimas. Hay que ser conscientes de que muchas veces no tenemos tiempo para leer y aceptamos las cookies, pero en el caso de las apps sí recomendaría a los ciudadanos que leyeran.
-¿Ha avanzado mucho la protección de datos?
-Claro, pero también es cierto que hace treinta años no era tan invasivo como ahora. Podía llegarte publicidad postal a tu domicilio, pero es muy diferente a la huella digital y el perfilado que se nos hace constantemente.
-Desde mayo del 2018 se aplica en toda la UE el nuevo reglamento de protección de datos, ¿cómo se está implementando?
-Creo que hay un conocimiento importante porque el 25 de mayo todos fuimos inundados con cientos de correos pidiéndonos el consentimiento. Un error por cierto porque con este reglamento hay bases jurídicas que legitiman el tratamiento de datos más allá del consentimiento, por lo que si por ejemplo existe un contrato ya no se necesita este permiso. Creo que las medianas y grandes empresas han hecho un esfuerzo importantísimo para adaptarse al reglamento, y para las pequeñas creamos una herramienta gratuita, Facilita, que les permite adaptarse de forma gratuita.