«Los jóvenes se creen inmunes, pero el COVID-19 también va con ellos»

R. D. SEOANE A CORUÑA / LA VOZ

SOCIEDAD

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El responsable de las ucis del Chuac no descarta tener que habilitar nuevos espacios para los pacientes críticos

23 mar 2020 . Actualizado a las 07:40 h.

David Freire Moar es ucista. Lleva desde 1979 trabajando en el Chuac, donde es el jefe de los cuidados intensivos en la más intensa crisis sanitaria que se recuerda.

-¿Cómo están los pacientes?

-Los pacientes cuando ingresan con nosotros siempre están graves. Ingresan porque pensamos que van a tener necesidad de ventilación artificial. Generalmente tienen neumonía bilateral, hay que sedarlos y pueden aparecer múltiples complicaciones. Hay alguno que lleva con nosotros desde el principio que ha mejorado. También tenemos al paciente cero, de 49 años, que parece que va a mejorar. Pero hay otros enfermos que ya tenían patologías previas al coronavirus y que están más graves.

-Y lo peor está por llegar, dicen.

-Hay que esperar y ver la evolución. Esto es algo muy nuevo, la información que tenemos es la que nos llega de la experiencia en China o Italia... es muy difícil saber qué camino va a llevar esto.

-Aún no hemos llegado al pico de mayor incidencia.

-Saldremos de esta situación. Esperemos que sí, hay que tener confianza, nos costará más o menos, pero saldremos. Dicen que el pico vendrá a mediados de abril. A ver si con las medidas de restricción de los movimientos de las personas se puede contener un poco la infección y tiramos para adelante.

-La población de edad es la de mayor riesgo ¿siempre?

-La gran mayoría de los que necesitan cuidados intensivos son mayores, pero hay jóvenes también. Tenemos uno de 34 años que en principio no tenía patología previa evidente, pero sí tenía. Sí, la gran mayoría pasan de 70 y 80 años, con problemas como hipertensión, enfermedad pulmonar crónica… y a veces, aunque no es demasiado medible las defensas, alguno puede tener mayor susceptibilidad. La gran mayoría son personas de edad con patologías previas, pero hay jóvenes y es importante tenerlo en cuenta. De jóvenes nos creemos inmunes, nos dicen que nos quedemos en casa y podemos pensar que no va con nosotros, pero no son inmunes, sí que va con ellos Por no diseminar el virus y contagiar a otros y por ellos mismos. Hay que ser prudentes.

-Ustedes están levantando en tiempo récord una nueva uci.

-Sí, en donde estaban los antiguos quirófanos de la 5ª planta se están habilitando los espacios que ocupaban cinco quirófanos para que puedan albergar cada uno cuatro camas. Serán 20 plazas más de críticos. Son espacios que ya tenían conducciones de gases medicinales y oxígeno, ya hay enchufes para conectar los aparatos: respirador, bomba de infusión, máquina de diálisis…

-¿Junto a la uci que ya hay?

-Sí, en la misma planta, hay un pasillo de unos 25 metros. Aquí ya tenemos una uci dedicada a los pacientes COVID-19 con 16 camas. Al lado de la uci tenemos la Reanimación, con otras 16, que se está liberando para utilizarla en caso de ser necesario. Tendríamos así 32 más las 20, 52.

-¿Cuándo estará lista?

-Contamos con ella a principios de las semana que viene, es muy probable que el lunes ya esté funcionando. Salvo catástrofe tenemos margen suficiente.

-¿Serán suficientes?

-El primer ingresó en la uci fue el día 7, sale prácticamente a un paciente diario, por ahora. Claro que son pacientes de ingresos prolongados. ¿Serán suficientes 52 camas? Nadie puede saberlo, de verdad, pero tengamos confianza en que sí. En cualquier caso, como en cualquier situación de emergencia, si no llegan tendríamos que buscar lugares donde ingresarlos con soporte adecuado.

-Haría falta espacio y dotación tecnológica.

-Si un paciente está crítico necesita un respirador. Por ahora tenemos suficientes. Si sigue aumentando, habría que buscar más espacios. Ojalá, espero que no haga falta, pero hay que contemplarlo. Así como ahora se buscó espacio en los antiguos quirófanos de la 5ª, ojalá no sea necesario, pero en el futuro se podría hacer algo similar con los antiguos quirófanos de la 6ª planta.

-¿Y usar el Centro Tecnológico?

-Está muy bien dotado y tiene algún respirador. Si los necesitáramos, los subiríamos aquí. En cualquier caso, en el materno y en el Abente también hay áreas de Reanimación.

-¿Prevén tener que utilizarlas ?

-Conviene que los pacientes COVID-19 estén juntos, en un mismo sitio. Se podría adaptar esos espacios para otros enfermos críticos y dejar el Chuac para el coronavirus. Tenemos reuniones diarias y a veces un planteamiento que ahora te parece bueno, hay que variarlo. No se puede descartar nada. Todo depende como evolucione.

«Hasta ahora ha sido posible dividir la plantilla para cubrirnos si hay contagios»

En cuidados intensivos del Chuac trabajan 20 médicos especialistas y nueve residentes, además de un ejército de enfermeras y técnicos auxiliares. «Con los pacientes críticos normalmente hay mucho más personal, hay una enfermera por cada dos pacientes», explica Freire.

-¿Cómo está el personal?

-Hasta ahora como la uci todavía no está llena, establecimos una estrategia para no estar todos juntos todos los días en el hospital, para intentar evitar contagiarnos y tener reservas. Si uno cae, que haya médicos que lo cubran. Hasta ahora ha sido posible porque hay carga de trabajo, pero se va llevando.

-La uci es uno de los espacios de mayor riesgo de contagio.

-Y las unidades de hospitalización. Tenemos tres plantas adecuadas a pacientes COVID-19 a cargo de Medicina Interna, Infecciosos y Neumología. No son enfermos críticos, pero también tienen riesgo. Al principio en la uci llegamos a tener ocho médicos, contando los mir, en casa. Uno de ellos dio positivo. Se están reincorporando a trabajar. Médicos, enfermeros, todo el personal estamos en riesgo de podernos infectar. Es importante respetar las medidas de seguridad, la vestimenta, los equipos de protección, para intentar no caer.

-Además de por COVID-19, sigue habiendo otros críticos.

-Sí, claro, hay urgencias, operaciones que no se pueden demorar... Tenemos ocho plazas de uci que por ahora se están dedicando al resto, y en la 6ª hay una unidad de 14 camas habitualmente para corazón. Ahora que se restringen las cirugías programadas se está usando para los pacientes no COVID-19. La idea es que la 6ª quede para el resto y Reanimación de la 3ª para operaciones de urgencia. Porque vamos a seguir teniendo pacientes críticos no infectados por coronavirus.