El proyecto The Universal Fridge busca lograr un sistema para que más de 1.500 millones de personas del contienente puedan disponer de un sistema refrigeración
06 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Algo tan común en Europa como tener una nevera en casa para conservar la comida resulta algo prácticamente imposible en muchas zonas de África. Al carecer de acceso a la electricidad, la opción de usar este y otros electrodoméstico se hace totalmente inviable, aunque la gente pudiera disponer de ellos. En esa situación, no hay un modo eficaz de refrigerar los alimentos, dificultando notablemente el trabajo a la persona que en los hogares se encarga de hacer la comida. En África normalmente se trata de una mujer. «Iso obriga as mulleres a estar atadas as súas cociñas todo o día , provocando unha dependencia total e falta de oportunidades para o seu desenvolvemento», explica Ricardo Baaamonde uno de los impulsores del proyecto The Universal Fridge.
Bajo ese nombre se encuentran los ingenieros técnicos industriales colegiados de Coeticor Ricardo Baamonde Couto, Jesús Fernández Díez y Élida Pereiro López, que ayudó en labores de traducción de la web que sirve de escaparate para todo el mundo. Los dos primeros son profesores de Formación Profesional en el IES Universidade Laboral de Culleredo (A Coruña) y pertenecen a la asociación de voluntarios Operación Pangono Pangono. Con esta han desarrollado proyectos en África en varias ocasiones. Viajando allí se toparon con esa realidad, que pretenden solucionar apelando al talento colectivo y sin fronteras.
«O relacionamos co proxecto Reinvented Toilet da Fundación Bill Gates, no que propoñen alternativas ao lavado tradicional co mesmo fin», explica Baamonde. Su idea pasa por ejercer de imán de ideas a nivel internacional para encontrar una solución «as 1.500 millóns de persoas que non podemos refrixerar os seus alimentos». Para ello, pretenden llamar la atención de los técnicos, investigadores y científicos de todo el mundo que puedan dar una solución alternativa a la de esas neveras cuyo cable no se puede enchufar en ninguna pared.
Rentabilidad económica
«Alternativas para iso existen. Hai moitísimas —recalca Baamonde—. Desde as que funcionan con enerxía solar as do efecto Peltier ou con microcompresores. O problema é facelas rendibles e que sexan comercialmente viables para podelas fabricar a gran escala». Desde ese punto de vista llaman a la comunidad científica, en cooperación también con empresas y fundaciones, par que se unan a ellos y una a nosotros para encontrar esa nevera universal que se pueda usar en cualquier lugar de África, mejorando notablemente las vida de las personas.
No existe ningún otro movimiento que busque responder a este problema. En el verano del 2021 se celebrará The Universal Fridge Expo. Allí pretenden recopilar las diferentes soluciones para resolver el problema. «Agora é posible cambiar o mundo», concluye Baamonde.