Se utilizarán calzas y gorros desechables para probar calzado o sombreros, la ropa probada se desinfectará y se pondrá en cuarentena 48 horas
03 may 2020 . Actualizado a las 19:23 h.La inminente apertura de comercios llevará aparejados numerosos cambios que la Xunta ha reunido en un manual de recomendaciones de salud laboral enfocado a trabajadores y clientes. Así, se establecen una serie de propuestas para garantizar la distancia de seguridad, se dan a conocer nuevas disposiciones higiénicas y también se añaden medidas organizativas y de protección personal.
El texto entiende como recomendable el uso de mascarilla durante la estancia en un comercio y pone especial énfasis en la necesidad de no manipular aquellos productos que no se vayan a comprar. De este modo, insiste en poner al alcance de los clientes solo las piezas imprescindibles (por ejemplo, una por modelo) para que el personal del comercio disponga de un mayor control y evitar así que sea manipulada masivamente por la clientela. En este sentido, este catálogo de recomendaciones se centra especialmente en los probadores de ropa, que recomienda utilizar de forma parcial o alterna (uno abierto, otro cerrado), valorar el cambio de las habituales cortinas por paneles y puertas para facilitar su limpieza, la desinfección con lejía de estos espacios después de cada uso, que solo pueda entrar una persona por probador, así como la utilización de calzas y gorros desechables para probar calzado y sombreros. Además, los artículos probados se retirarán para ser desinfectados o se pondrán en cuarentena durante 48 horas.
El manual de recomendaciones preventivas insta a controlar el aforo de los comercios para garantizar la distancia de seguridad de dos metros en su interior, incluso con personal específico para marcar turnos de acceso, al tiempo que llama a establecer un horario de atención preferente para los mayores de 65 años, a señalar siempre que sea posible un recorrido de entrada y otro distinto de salida, y a solicitar el pago de forma preferente con tarjeta o aplicación móvil.
El texto también se refiere a los criterios sobre aquellas personas que no deben reincorporarse a sus puestos de trabajo por encontrarse con fiebre o haber mantenido contacto estrecho con personas enfermas. En este sentido, establece la categoría de personas trabajadoras especialmente sensibles al covid-19, que deberán ser examinadas por el personal sanitario del Servizo de Prevención de Riscos Laborais. En el caso de los autónomos, añade que se le considerará con indicación de incapacidad temporal a aquel que pertenezca a uno de los grupos vulnerables al coronavirus, así como cuando la exposición de su puesto sea considerada de riesgo, las medidas preventivas no garanticen el control del riesgo o la valoración de la inspección médica así lo acredite. Las altas y bajas serán acreditadas por el médico de Atención Primaria, y para la prestación económica se considerará una situación asimilada a la de un accidente de trabajo.