El potente ciclón Epsilon ha obligado a activar avisos por lluvias, viento e intenso oleaje
27 oct 2020 . Actualizado a las 13:10 h.Epsilon ya es una potente borrasca situada entre Groenlandia e Irlanda. La transición de huracán a ciclón extratropical ha ocurrido de manera explosiva. Su presión cayó más de 20 milibares en menos de 24 horas. Los vientos que genera actualmente alcanzan los 180 kilómetros por hora. Esas rachas huracanadas producen un intenso mar de viento en el Atlántico. Es un tipo de oleaje revuelto que representa una amenaza para la navegación marítima. Y cuando este tipo de mar caótico comienza a desplazarse por la superficie oceánica, durante su viaje comienza a organizarse poco a poco hasta que se encuentra finalmente con una zona somera o de poca profundidad y la energía cinética se convierte en potencial, permitiendo que el mar se levante poderosamente y se produzcan las grandes olas o mar de fondo.
Existe un experimento mental, como los que hacía Albert Einstein con la velocidad y el tiempo, que puede ayudar a entender estos dos conceptos. Imagínese que tiene un secador y una bañera llena de agua. Si activa el aparato y dirige el aire que sale con potencia hacia el agua conseguirá agitarla, creando un mar revuelto. El secador sería la borrasca y el aire que sale estaría generando mar de viento en la bañera. Además, el agua revuelta también se movería de manera constante hacia el final de la bañera como mar de fondo.
Hay también un tercer factor que debe tenerse en cuenta, la configuración de mar combinada, muy habitual en Galicia durante los temporales atlánticos. Cuando coincide la dirección del mar de fondo con la dirección del viento local, el oleaje siempre golpea con más fuerza. En la costa gallega suele ser frecuente una situación de mar combinada del noroeste.
La profunda borrasca Epsilon está situada a más de 3.000 kilómetros de Galicia, pero erosiona el océano con tanta violencia que el mar de fondo llegará hasta la costa gallega y producirá olas por encima de los 8 metros de altura, especialmente en la provincia de A Coruña, donde MeteoGalicia ha activado durante la jornada del miércoles un aviso rojo, el primero del otoño, entre las tres de la tarde y las nueve de la noche. Y aunque será una situación de mar combinada del noroeste y la Luna se encuentra casi en fase llena, el viento no soplará demasiado fuerte y la bajamar coincidirá con el momento exacto en el que se espera que el mar de fondo avance con más fuerza hacia el litoral. Esto evitará, por ejemplo, que el agua pueda alcanzar el paseo marítimo de A Coruña. El océano, como la atmósfera, no contiene fronteras. Por ello, un fenómeno que tiene lugar a miles de kilómetros de distancia puede afectar a Galicia.