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Los jóvenes también se desmadran en la cuarentena de Palma de Mallorca: música alta, alcohol y lanzamiento de objetos

Álvaro Soto / Colpisa

SOCIEDAD

Atienza / EFE

La policía municipal ha tenido que intervenir para apaciguar los ánimos ante las quejas de usuarios de un hotel cercano

30 jun 2021 . Actualizado a las 14:21 h.

El desmadre en Mallorca continúa a pesar del megabrote y del aislamiento. Las noches en el hotel de Palma en el que guardan cuarentena 249 jóvenes no están siendo precisamente tranquilas. La Policía Municipal ha tenido que intervenir para apaciguar los ánimos ante el desmadre en el que se habían convertido este recinto. Las quejas de los usuarios de un hotel cercano advirtieron a los agentes, que se encontraron con un panorama más propio de un botellón que de un aislamiento por motivos de salud pública.

En muchas habitaciones, la música estaba a todo volumen y desde las terrazas, un grupo de estos adolescentes lanzaba objetos o gritaba a las personas que caminaban por las aceras. Entre los momentos más surrealistas en estos días, la visita de una mujer que, con un altavoz desde la calle, les decía a los jóvenes: «Estáis retenidos ilegalmente. Os apoyamos para que os liberen, que sepáis que estamos con vosotros». En los balcones, muchos de ellos aplaudían y vitoreaban esta muestra de apoyo.

Además, los policías descubrieron que bares de la zona estaban suministrando alcohol a los jóvenes, que lo introducían en sus habitaciones gracias a lianas fabricadas con las sábanas de las camas y con toallas, además de cubos de plástico. Entre los empleados que atienden a los cuarentenados abundan los testimonios de que los jóvenes ensucian los pasillos y tiran la comida que les prepara el hotel, ya que prefieren, para alimentarse, pedir comida a domicilio a través de aplicaciones móviles en establecimientos de la zona. Los repartidores dejan esta comida en la recepción y estos mismos empleados se las suben a las habitaciones.

Esta pasada madrugada y tras unas horas sin que nadie supiera dónde estaba, uno de los dos jóvenes que habían escapado del hotel volvió al establecimiento de forma voluntaria tras ser localizado por la Policía Nacional. En este caso, era un mayor de edad que dio negativo en las pruebas PCR. Los agentes también localizaron al segundo joven, que ahora se encuentra con su tutor.

La delegada del Gobierno en Baleares, Aina Calvo, ha explicado que se ha reforzado la vigilancia policial sobre el hotel para impedir la llegada de alcohol y para controlar más a los adolescentes, que incluso dentro del hotel, siguen favoreciendo el aumento de los contagios al reunirse sin guardar el aislamiento. «La inmensa mayoría de los jóvenes ha tenido un comportamiento razonable, educado y comprensivo», ha señalado Calvo en una entrevista en la Ser.

El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Palma debe decidir este miércoles o jueves si ratifica el confinamiento de los 235 jóvenes que permanecen en cuarentena. Pero previamente, ayer, la Fiscalía de Baleares pidió al juzgado que se oponga al confinamiento forzoso en régimen de aislamiento de los estudiantes y de esta forma, rechazó avalar la solicitud presentada en los juzgados de Palma por el Gobierno balear, que quería que la justicia ratificara esta medida. Una jueza ha rechazado este miércoles más de cien peticiones del habeas corpus por parte de los jóvenes y sus familias.

La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha asegurado este miércoles que el Ejecutivo autonómico acatará la decisión de la justicia. «Nos someteremos a lo que nos diga la justicia», ha declarado.

Un alto porcentaje de los jóvenes llegados a Galicia desde Mallorca el pasado martes han dado positivo. El brote ha provocado la subida de nivel de restricciones en el concello de Pontevedra