Coca-Cola, el CETIM y el CSHG se sumaron a un encuentro organizado por La Voz
22 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.La sostenibilidad se ha convertido en uno de los grandes desafíos para las administraciones, las entidades privadas, así como para todas las capas de la sociedad. Los efectos que generan las emisiones de los gases de efecto invernadero evidencian la necesidad de un cambio cuya hoja de ruta diseñó la propia ONU hace seis años. Fue en 2015 cuando el organismo dio luz verde a la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible. La estrategia, que incorpora 17 objetivos, incluye diferentes líneas de actuación, desde las directamente relacionadas con el cambio climático a otras que persiguen la defensa del medio ambiente en su concepto más amplio.
«Estamos en el camino, pero tenemos que acelerar, tanto los objetivos como los compromisos porque esto urgente y tenemos que ir aún más rápido», sostiene Carmen Gómez-Acebo, directora de Sostenibilidad de Coca-Cola Europacific Partners. Gómez-Acebo fue una de las participantes en un encuentro organizado por La Voz para desgranar las estrategias que, tanto administraciones públicas como empresas del ámbito privado, vienen desarrollando en favor del desarrollo de la economía circular y la descarbonización de sus procesos. En el caso de Coca-Cola, la compañía dispone de un plan de acción climática diseñado de forma milimétrica. «Hemos adelantando nuestros compromisos para ser más ambiciosos», explica su directora de Sostenibilidad. Coca-Cola se ha marcado como reto «ser neutra de carbono en el año 2040» en toda su cadena de valor, desde los ingredientes, a los envases pasando por el transporte y los equipos de frío. Pero antes, en 2030, tratará de conseguir un objetivo intermedio: reducir en un 30% sus emisiones. Para conseguirlo, reconoce Gómez-Acebo, «es fundamental contar con nuestro proveedores porque, como en todas las empresas, un porcentaje muy alto de nuestras emisiones son indirectas, más de un 90% de ellas».
Desde la administración también se implementan mecanismos en favor del desarrollo sostenible y uno de los organismos que ha apostado por ello es el Centro Superior de Hostelería de Galicia. Su directora —Marta Fernández— tiene claro que «nuestro objetivo de futuro es conseguir que la oferta gastronómica de Galicia sea sostenible» porque «desde las entidades públicas debemos desarrollar acciones que visibilicen la necesidad del cambio. Son metas pequeñas, pero todas contribuyen»
Una de las claves del éxito de las políticas más sostenibles radica en la actividad investigadora. Galicia cuenta con uno de los centros tecnológicos de referencia en el país. El Centro Tecnológico de Investigación Multisectorial (CETIM) —ubicado en el polígono empresarial de Alvedro— es pionero en economía circular.
En ocho años de vida han multiplicado su equipo de investigadores, sus proyectos, así como su capacidad inversora. «Empezamos con 3 personas y ahora somos 60 profesionales», relata su directora ejecutiva Lucía Vázquez. En la actualidad, añade, «estamos ejecutando unos 56 proyectos de investigación y desarrollo. Colaboramos con unas 256 entidades y hemos movilizado 240 millones de euros. Esto da una foto clara de lo que hemos crecido». Y no solo en ese ámbito, también en inversión tecnológica y en equipamiento científico-técnico.
Economía circular
Los envases de Coca Cola representan el 40% de la huella de carbono con lo cual, no es de extrañar, que la compañía apunte de forma explícita a esa dirección a la hora de cumplir con los objetivos marcados en su plan de acción climática. Esa dimensión, subraya Gómez-Acebo, es «fundamental». En especial en lo relativo al capítulo de los envases. Su estrategia persigue eliminar la materia prima innecesaria, «materiales plásticos y no plásticos que nos podemos ahorrar en la cadena de valor». Pero su gran reto pasa por conseguir, en la próxima década, un 100% de rPET, PET reciclado basado en economía circular.
En la actualidad, las marcas sin gas de la compañía —Aquarius, Nestea, zumos y aguas— ya tienen un 50% de PET reciclado. El resto de productos, los carbonatados como Coca-Cola o Fanta cuentan con un 25% y la marca de agua Smartwater ya asciende al 100%. El 2022 «transicionaremos la mayor parte de las marcas de nuestro porfolio a un 50%». En países como Suecia, Noruega o Holanda ya cumplen los objetivos al 100%.
El consumo del futuro también será diferente. El gigante de las bebidas impulsará envases rellenables y reutilizables. Nuevos modelos de negocio apoyados en la tecnología permitirán mantener la calidad de sus productos al acceder a ese tipo de dispensado de bebidas.