
China ha registrado esta semana la cifra más alta de precipitación: 200 litros en una hora. Y un tifón llega este fin de semana
24 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El este de China se enfrenta a una situación dramática. Algunas regiones como Whenzou han sufrido durante los últimos días una lluvias que perfectamente se podrían calificar como apocalípticas. En una sola hora se acumularon 200 litros por metros cuadrado. Se trata de la cifra récord de precipitación en la historia del gigante asiático desde que existen registros y las más devastadoras en 1.000 años. En un solo día cayeron 600 litros por metro cuadrado. Para poner en valor esa cifra veamos algunos números destacados en el mapa mundial de la lluvia.
En el hemisferio norte se pueden seleccionar tres lugares de cada continente donde las lluvias riegan con mucha generosidad. En Norteamérica, por ejemplo, destacan Seattle y Vancouver. Los frentes que llegan desde el Pacífico descargan unos 1.300 litros por metro cuadrado anualmente. Una cifra muy parecida a la media gallega, 1.200. Eso sí, el área que abarca desde las Rías Baixas hasta la Costa da Morte asciende hasta los 2.500. La media se encoge mucho por la escasa precipitación que cae en el interior de la comunidad.

El lugar más lluvioso de Europa se encuentra en el norte del continente, en Bergen (Noruega). Cada año se recogen de media unos 2.200 litros. Y en cuanto a Asia existe un tipo de precipitación capaz de generar una cantidad enorme de agua: los monzones. En el noroeste de la India dejan una media anual de 1.300, pero algunas regiones pueden registrar hasta 9.500.
En el mapa global de la lluvia, la cifra anual más elevada supera ligeramente los 3.000 litros. Pues bien, en China en un solo día cayó la mitad de lo que suele hacerlo en algunos de los lugares más húmedos de la Tierra y una sexta parte de lo que precipita en las zonas más extremas durante un año. Incluso en un región tan acostumbra a la lluvia como Galicia, esa tromba de agua hubiese generado un desastre inimaginable.
En los últimos años, el episodio de lluvia más extremo ocurrió en el municipio coruñés de Sada a finales de marzo del 2016. La combinación de un frente que se quedó estancado en la provincia coruñesa y que había recibido, además, una inyección de humedad tropical por medio de un río atmosférico dejó imágenes que solemos ver precisamente en los países donde se desarrollan los monzones, acostumbrados a las inundaciones. En aquel episodio se acumularon 103 litros en 24 horas. En las zonas inundadas de China cayó el doble en 60 minutos.































El problema de China es que el drama continúa. Una nueva amenaza se cierne sobre la misma región que ahora mismo está tratando de recuperarse de las inundaciones de las últimas horas; el tifón In-fa. En estos momentos, su recorrido conduce directamente a este potente sistema de bajas presiones tropical hacia el este de China. Se espera que toque tierra entre el sábado y el domingo. El ciclón viene cargado con mucha humedad y los modelos están señalando que podría llegar a descargar unos 1.000 litros por metros cuadrado hasta el próximos martes. Se trata, por tanto, del peor escenario posible.