El piragüista gallego y su novia habían aplazado la ceremonia el pasado año debido a las circunstancias sanitarias
30 ago 2021 . Actualizado a las 16:23 h.Después de una larga espera, el piragüista olímpico Cristian Toro y Susana Salmerón se convirtieron este domingo en marido y mujer en una boda celebrada frente a uno de los paisajes más hermosos de Galicia. La pareja tenía previsto casarse el 26 de septiembre del año pasado, pero las circunstancias los obligaron a aplazar una boda que desde hacía tiempo aguardaban con ilusión. «Lo bueno se hace esperar», escribió ella en sus redes sociales. Y lo bueno, por fin, llegó este domingo: en la finca La Atlántida, un balcón espectacular sobre la también espectacular playa de A Lanzada (O Grove), la pareja pudo darse por fin el sí quiero, rodeada de alrededor de 120 de sus personas más queridas, según informa Rosa Estévez.
El novio fue el primero en llegar del brazo de la madrina, como manda la tradición, y aguardó a Susana, con la que mantiene una relación desde hace cuatro años, mientras sostenía en brazos al hijo de ambos. El pequeño Alejandro, que en noviembre cumplirá tres años, se empeñaba en despeinar a su padre, elegantemente vestido y arreglado para este momento tan especial. La novia, radiante, no se hizo esperar, con su vestido blanco sin mangas y escote de pico y el pelo semirrecogido.
La ceremonia civil tuvo lugar a la una de la tarde. El momento más emotivo se produjo cuando los novios pronunciaron sus votos. El piragüista, muy emocionado, se vio obligado a interrumpir su lectura a causa de las lágrimas.
Una vez concluido el acto, tuvieron lugar los aperitivos, que se sirvieron en los hermosos jardines de la finca. Llegaba después la hora de la comida: ante los invitados, entre los que figuraba el también piragüista Javier Hernanz, se desplegó un menú largo y potente, cargado de sabores y de alegría. Tras él llegaría una copa en las mesas y el fin de fiesta. La pandemia, querámoslo o no, sigue marcándonos la manera de vivir.
Hace tres años, Cristian Toro y Susana Salmerón fueron protagonistas de un momento muy romántico y emotivo cuando el piragüista gallego sorprendió a su pareja pidiéndole matrimonio en el Mundial justo después de lograr la medalla de plata en el K2 200 junto a Saúl Craviotto. El joven se acercó hacia la enfermera y pediatra con el micrófono en la mano para pedir su mano. En aquel momento, la pareja había iniciado su relación hacía poco más de un año y ella estaba embarazada de siete meses.