Los desplazamientos se desbocan en Rusia en mitad de la semana no laborable mientras la situación epidemiológica empeora

Gabriela Consuegra
Gabriela Consuegra REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

MAXIM SHIPENKOV | EFE

El país vive su récord de contagios y muertes desde que inició la pandemia y solo en la última jornada ha acumulado 40.400 casos y 1.155 fallecimientos

05 nov 2021 . Actualizado a las 11:13 h.

Con 40.402 nuevas infecciones y 1.155 muertes notificadas este lunes, Rusia vuelve a batir su propio récord y registra sus peores cifras desde el inicio de la pandemia. La curva de contagios, lejos de estabilizarse, continúa en aumento y amenaza con mantener una evolución exponencial. Desde hace semanas, el país encadena miles y miles de contagios diarios. El mes de octubre se ha quedado a un paso del millón de positivos, con 983.425 casos en total, y noviembre no pinta mejor. Por delante: el puente del Día de la Unidad del Pueblo, que se celebra este jueves, y la semana de vacaciones obligatorias remuneradas, que inició el sábado. Esta última es la medida con la que el presidente Vladimir Putin pretende frenar el avance de la pandemia, sin embargo, todo indica que se le podría volver en contra.

Dependerá de que los ciudadanos rusos decidan limitar sus desplazamientos durante esta temporada. De lo contrario, el país se enfrenta a una combinación explosiva. El pasado miércoles, el Kremlin advirtió a los ciudadanos que evitaran viajar desde el 30 de octubre y hasta el 7 de noviembre, la totalidad del período no laborable. Sin embargo, todo apunta a que la población está desplazándose masivamente dentro y fuera del país.

Según reseña The Moscow Times, las reservas de paquetes turísticos a lugares como Turquía y Egipto se han disparado desde el anuncio de Putin. Lo mismo ha sucedido con los destinos más atractivos dentro de las fronteras rusas, como la ciudad de Sochi. El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, comunicó que «los epidemiólogos han expresado su preocupación debido a que muchas personas están planeando viajar» y agregó que desde el Gobierno esperaban que los días no laborables, en cambio, ayudaran a «mejorar la situación epidemiológica». 

Para atajar la situación, las autoridades de aviación rusas pidieron a las aerolíneas nacionales que no aumentaran el número de vuelos comerciales para satisfacer el aumento de la demanda durante el período vacacional. Sin embargo, las restricciones no pueden afectar a los vuelos internacionales.

Pero no solo preocupan los viajes sino también las aglomeraciones. No se han hecho esperar en puntos de encuentro como la Plaza Roja, la más famosa de Moscú, en la que este domingo se agolpaban decenas de personas frente a las puertas del Mausoleo de Lenin. Tampoco fueron excepción los grandes eventos como el Artlife Fest 2021, una inmensa exposición de arte contemporáneo que se lleva a cabo en la capital.

Precisamente en Moscú, se identificaron 7.103 nuevas infecciones en la última jornada: 3.250 en San Petersburgo y 2.866 en la región de Moscú. El alcalde de la ciudad, Serguéi Sobianin, aseguró este lunes que «lamentablemente la situación en la capital continúa siendo difícil», ya que solo durante la última semana se produjeron unas 10.000 hospitalizaciones de personas en estado grave. Peskov, se refería así a la situación hospitalaria en el conjunto del país: «La mayoría de las camas de los hospitales están ocupadas y la situación no muestra signos de que vaya a mejorar por el momento. La presión sobre nuestros médicos es extraordinaria. Muestran un verdadero heroísmo».

Por todo esto, las ciudades rusas estarán sometidas a restricciones que pretenden controlar el contacto entre las personas para frenar la cadena de contagios. Las medidas incluyen el cierre de centros comerciales, salones de belleza, gimnasios y servicios de automóviles. Las farmacias, hospitales, tiendas de alimentos, museos y teatros permanecerán abiertos, aunque la mayoría de los eventos de entretenimiento han sido cancelados. Los cafés y los restaurantes permanecerán abiertos, pero solo para pedidos a domicilio o recogida de comida para llevar.

Rusia es actualmente uno de los países con un menor índice de vacunación, por lo que el virus golpea con más fuerza a la población. De 142,3 millones de habitantes, se estima que solo el 32,3 % está inmunizado, a pesar de contar con una vacuna de fabricación nacional: la Sputnik V, que se administra de forma gratuita en el país.

No obstante, el ritmo de las vacunación se ha acelerado un poco luego de que algunas regiones impusieran un régimen de vacunación para los trabajadores de ciertos sectores de la economía, así como pasaportes covid para ingresar en lugares cerrados, según el sitio web Gogov, que rastrea desde hace 10 meses la aceptación de las vacunas en el país. Se estima que Rusia está administrando más de 300.000 primeras dosis al día, frente a las 120.000 diarias que suministraba a principios de octubre.