Los expertos: «Las coinfecciones de gripe y covid apuntan a la transmisión estacional del virus»
SOCIEDAD
Los casos detectados en Galicia no han necesitado hospitalización. «Son ganas de asustar y de confundir, las coinfecciones de virus han existido toda la vida»
04 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.En todo el mundo se han venido detectando casos de coinfecciones entre el coronavirus y el virus de la gripe en las últimas semanas, pero tal vez sea cierto que Israel ha tenido el primer caso de flurona, porque hasta ahora nadie le había puesto un nombre tan aparatoso —mezcla de flu (gripe) y coronavirus—. La comunidad científica simplemente había descrito sobriamente estos casos porque no hay razones para la estridencia. «Son ganas de asustar y de confundir, las coinfecciones de virus han existido toda la vida», aclara el jefe de servicio de microbiología del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo, Benito Regueiro.
Su laboratorio registró algunos de estos casos hace varias semanas. También documentaron infecciones mixtas entre el coronavirus y el virus respiratorio sincitial (VRS), el que causa las bronquiolitis en los niños. En Galicia se han detectado coinfecciones de gripe y coronavirus tanto con la variante delta plus del SARS-CoV-2 y como con la ómicron. Se dieron en pacientes asintomáticos, algunos de ellos detectados en cribados, y que no han llevado a nadie a ser ingresado. «Estamos haciendo miles de PCR con el triple test [coronavirus, gripe y VRS] y entonces encontramos casos», dice.
Para Regueiro, catedrático de microbiología, que estén empezando a aparecer las coinfecciones del coronavirus y otros patógenos es una señal que apunta a que «está evolucionando hacia una transmisión estacional, en relación con otras ondas de virus respiratorios, y esto puede suponer una vuelta a la normalidad; es positivo». El año pasado, la dominación absoluta del SARS-CoV-2 impidió que otros virus circulasen. No hubo gripe, no hubo VRS y apenas aparecieron catarros por otros patógenos habituales (adenovirus, rinovirus, bocavirus...). Ahora sí. Por eso Regueiro postula que las coinfecciones pueden ser el inicio de un camino que lleve a «que no estemos en pandemia permanente, con una onda pandémica detrás de otra, sino que el coronavirus busque un espacio estacional». Eso puede explicar que el SARS-CoV-2 haya reducido la interferencia, ese fenómeno en el que la dominación de un virus impide la circulación de los otros.
Que dos virus invadan el mismo cuerpo no significa que puedan mezclarse entre ellos, como da a entender el nombre flurona. Este proceso, conocido como recombinación, sí puede producirse con dos variantes del mismo patógeno, pero no entre la gripe y el SARS-CoV-2, que tienen mecanismos diferentes e infectan distintos tipos de células.
En general no está habiendo coinfecciones graves con el coronavirus. Al principio de la pandemia, en China sí se habían descrito casos. Pero la semana pasada, el director del Centro Nacional de Gripe de Valladolid, José María Eiros, explicaba a La Voz que entre los casos detectados en España no ha habido perfiles de gravedad. Es algo que va a depender más de las características del individuo que de la coincidencia de los dos virus.
Sí es habitual que existan las contagios de dos virus a la vez. «En el bocavirus lo vemos con frecuencia, pero muchas veces no le damos mayor importancia», dice Benito Regueiro.
Embarazadas, enfermos crónicos y mayores, los más susceptibles
No todo el mundo tiene las mismas probabilidades de contagiarse con el coronavirus. Tampoco con el coronavirus y la gripe a la vez. «Las personas mayores, los que están en tratamientos con corticoides, los pacientes oncológicos, los inmunodeficientes o las personas con VIH mal controlado son más susceptibles a infectarse de estos virus y también a las coinfecciones», explica la catedrática de Inmunología África González, de la Universidad de Vigo. También las embarazadas y las personas con síndrome de Down.
La expresidenta de la Sociedad Española de Inmunología recuerda que «se pueden hacer cosas para ayudar al sistema inmunitario a que funcione mejor: una buena nutrición, ejercicio, dormir las horas necesarias y evitar el estrés».