Se trata del cuarto evento de blanqueamiento que se produce desde el año 2016
11 abr 2022 . Actualizado a las 11:28 h.En el año 2016 la Gran Barrera de Coral en Australia, el mayor arrecife del mundo que se extiende a lo largo de unos 2.300 kilómetros y que incluso puede observarse desde el espacio sufrió un devastador episodio de blanqueo. Ahora científicos australianos acaban de anunciar un nuevo evento de muerte masiva. Después de realizar estudios aéreos de más de 750 arrecifes, se ha confirmado que hace unas semanas se ha registrado el sexto blanqueamiento generalizado desde 1998.
«Este blanqueamiento masivo de corales en el arrecife, el cuarto desde 2016, se ha producido a pesar de las condiciones de La Niña durante el verano austral», reconoce el científico David Wachenfeld, científico. La Niña es la fase más fría de la Oscilación del Sur, durante la cual los patrones combinados de circulación atmosférica y oceánica en el Pacífico tropical alteran el clima global. Las condiciones de La Niña suelen traer más lluvia y temperaturas más frías sobre el arrecife.
Los eventos de blanqueamiento son causados ??por temperaturas de la superficie del mar sostenidas y más cálidas de lo habitual. Los corales tienen una relación simbiótica con las algas fotosintéticas, que proporcionan nutrientes a los pólipos de coral, así como sus colores brillantes. El estrés por calor hace que los corales expulsen las algas , dejando las estructuras esqueléticas con una apariencia blanqueada.
El episodio más reciente de calentamiento comenzó con un aumento notable de la temperatura superficial del mar en las aguas de Queensland en diciembre del 2021. A principios de marzo de este año, la temperatura del agua se disparó y se mantuvo alta durante varias semanas, lo que generó una ola de calor marina que provocó la muerte del coral.
A medida que el calentamiento global se intensifica, este tipo de eventos de blanqueamiento masivo se vuelven más frecuentes, duran más tiempo y afectan a los arrecifes incluso coincidiendo con La Niña, que actúa precisamente enfriando el océano. «Estos episodios son un recordatorio de la importancia de la reducción global de las emisiones de gases de efecto invernadero y también las sólidas acciones de gestión marina que respaldan la resiliencia de este magnífico ecosistema vivo», asegura Wachenfeld.