Fin de las mascarillas: ¿qué pasará con peluquerías, ópticas o gimnasios?

Marta Otero Torres
marta otero LA VOZ

SOCIEDAD

ALBERTO LÓPEZ

Cientos de empresas desconocen todavía si la letra pequeña del nuevo decreto les incluirá en el grupo de lugares donde prescindir del cubrebocas

19 abr 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La letra pequeña del decreto que hoy aprobará el Consejo de Ministros, en el que se establece el fin de la mascarilla en los interiores, aclarará algunas dudas surgidas tras la escasa información que Sanidad ha ofrecido al respecto. Muchos sectores, a tan solo poco más de un día de que la norma entre en vigor, desconocían ayer si entraban en el grupo de lugares donde no es obligatorio su uso.

centros comerciales

Sin mascarilla. Lo que sí especificó el ministerio es que el uso de mascarilla no será obligatorio en centros comerciales ni grandes superficies. Es decir, el cliente que vaya a unos grandes almacenes o a un hipermercado a hacer la compra no tendrá que llevar cubrebocas, lo mismo que en las tiendas individuales. Solo se recomienda su uso en estos lugares cuando haya grandes aglomeraciones de gente. Los clientes de estos establecimientos no están obligados a llevar la mascarilla, otra cosa es que los empleados si lo estén, si es que la empresa así lo decide.

centros de estética

Peluquerías y clínicas. Es una de las grandes dudas del nuevo decreto. Algunos establecimientos no sabían ayer si se liberaría el uso de la mascarilla en su interior. Es el caso de las ópticas, por ejemplo, porque la ministra, Carolina Darias, aseguró el pasado fin de semana que sí sería obligatoria en las farmacias, que se consideran ámbito sanitario. En esta misma línea, las dudas surgen con todas las clínicas que ofrecen servicios relacionados con la belleza y establecimientos donde se realizan tratamientos estéticos, como peluquerías, solarios o salones de depilación, entre otras.

gimnasios

Primeras caras despejadas. Donde sí se supone que se elimina la protección es en el ámbito deportivo, aunque tampoco está claro hasta que la norma se publique. Esto significaría liberarnos de forma definitiva del cubrebocas en el gimnasio o la escuela de baile, por ejemplo, aunque en la práctica ya había ayer mucha gente que entrenaba en los centros deportivos gallegos sin mascarilla.