El Gobierno chino suaviza las restricciones del covid para aplacar las protestas extendidas por el país
SOCIEDAD
Varias personas se han enfrentado con la policía en Cantón lanzándoles botellas de cristal
30 nov 2022 . Actualizado a las 20:25 h.El Gobierno chino —o más bien los gobiernos, porque las protagonistas en muchos casos son las autoridades regionales— están optando por la estrategia del palo y la zanahoria para contener la oleada de protestas motivadas por casi tres años de restricciones draconianas para luchar contra el covid. Así, mientras incrementan la presencia policial en las calles, empiezan a dar signos de cierta apertura en cuanto a las medidas de confinamiento.
El ejemplo más claro es el de la ciudad de Cantón, en la que viven 15 millones de personas y donde según se puede ver en algunos vídeos difundidos a través de las redes sociales se vivieron durante la pasada noche los momentos más tensos. En ellos se observa cómo varias personas lanzan botellas de vidrio contra los policías antidisturbios enfundados en trajes de protección de plástico blanco y cómo los agentes responden con botes de gases lacrimógenos. También se muestra cómo una parte de esos jóvenes son conducidos por los policías, aparentemente detenidos porque llevan las manos a la espalda.
Pese a ello, y a que la región es de las más azotadas por los contagios, las autoridades sanitarias locales anunciaron ayer el levantamiento de los confinamientos en cinco distritos mientras que en el de Haizhu, el más afectado, los contactos de los contagiados podrán aislarse en sus casas en lugar de en centros comunitarios.
«Los confinamientos, en caso de establecerse, deben ser levantados rápidamente y deben llegar a su fin cuando sea necesario para minimizar los inconvenientes ocasionados para la población», ha señalado la subdirectora de la comisión de sanidad de Cantón, Zhang Yi, en la prensa local.
En Zhengzhou, donde está la mayor fábrica de productos de Apple del mundo y se registraron disturbios por obligar a los trabajadores a permanecer en la planta en la que hubo brotes, se retiraron ayer los «controles de movilidad», que es como denominan las autoridades locales a lo que en la práctica se traduce en encierros bastante estrictos.
La directriz enviada por el Gobierno central desde Pekín advierte de los peligros de realizar test masivos y extender los confinamientos. Sin embargo, dentro de las altas esferas del régimen no todos comparten esa estrategia de distensión. El secretario del Comité Político y Jurídico Central del Partido Comunista Chino, Chen Wenqing, ha pedido «medidas enérgicas contra las actividades de infiltración y sabotaje por parte de fuerzas hostiles de acuerdo con la ley». Reclamó que se actúe de manera expeditiva «contra los actos ilegales y criminales que perturban el orden social» para «mantener de manera efectiva la estabilidad social general».