Google invierte 370 millones en un rival de OpenAI en inteligencia artificial
SOCIEDAD
La compañía Anthropic es responsable de Claude, competidor directo de ChatGPT
07 feb 2023 . Actualizado a las 09:02 h.Microsoft parece haberle ganado la partida a Google en el terreno de la inteligencia artificial (IA) con su perspectiva de implantar, en apenas unas semanas, los recursos de su chatbot ChatGPT dentro de su motor de búsqueda Bing. Pero Google no se quedará con los brazos cruzados esperando a que sus rivales definan el nuevo modelo de navegación y búsquedas en internet. Alphabet, la empresa matriz de Google, ha anunciado una inversión de 400 millones de dólares (370 millones de euros) en la startup especializada en inteligencia artificial Anthropic. Esta compañía tiene en desarrollo un simulador de conversación llamado Claude que rivalizará con el famoso ChatGPT de OpenAI, según ha desvelado Bloomberg y recoge Europa Press.
Anthropic es una compañía fundada en el año 2021 por los antiguos líderes de OpenAI, incluidos los hermanos Daniela y Dario Amodei, que son presidenta y consejero delegado de esta compañía, respectivamente.
Tanto Google como Anthropic han rechazado hacer declaraciones al respecto, pero han anunciado por separado un acuerdo mediante el cual la segunda de ellas tendrá acceso a los servicios de computación en la nube del gran buscador.
El acuerdo supone un nuevo ejemplo de la alianza entre gigantes tecnológicos y una startup especializada en inteligencia artificial a medida que dicho campo adquiere una mayor notoriedad en los mercados con sus aplicaciones capaces de crear textos y obras de arte en apenas unos segundos.
De hecho, con anterioridad a la colaboración entre Google y Anthropic, Microsoft ya invirtió 10.000 millones de dólares (9.251 millones de euros) hace unos años, precisamente, en la compañía OpenAI.
Las grandes tecnológicas libran ahora una dura batalla en el terreno de la inteligencia artificial, acentuada desde que ChatGPT se abrió al público a finales del pasado mes de noviembre. Los responsables de Google han asegurado que en las próximas semanas también pondrán nuevos modelos de lenguaje a disposición de los internautas «para que la gente pueda interactuar directamente con ellos», según palabras del CEO de Google Sundar Pichai. «Hemos estado preparándonos para ese momento desde principios del pasado año y vais a ver muchas cosas en los próximos meses», subrayó. «La inteligencia artificial es la tecnología más profunda en la que trabajamos actualmente. Estamos solo en el principio de nuestro viaje y lo mejor está por llegar», añadió Pichai.
Google, amenazado por la veloz implantación de ChatGPT
l. M.
La veloz implantación de ChatGPT, la herramienta de lenguaje predictivo creada por OpenAI y abierta a todos los usuarios a finales de noviembre del 2022, ha demostrado que el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) ha ido mucho más deprisa de lo que señalaban hasta hace poco las previsiones más optimistas. En apenas dos meses ha logrado millones de usuarios e interacciones con el robot y ha avivado el debate sobre la relación entre el hombre y las máquinas y las amenazas que esto plantea.
Sus avances han sorprendido a los expertos y han hecho saltar las alarmas en el seno de Google, compañía que ve amenazada su posición de liderazgo en el ámbito de las búsquedas en internet debido a la llegada de este chatbot, capaz de interactuar y mantener conversaciones de texto con un lenguaje sorprendentemente natural.
Microsoft, que anunció en enero una inversión de «miles de millones» de dólares en la empresa OpenAI, se prepara para incorporar dentro de pocas semanas a su motor de búsqueda, Bing, una versión más rápida y rica de ChatGTP, bautizada como GPT-4.
Su objetivo es responder a las dudas y consultas de los internautas con resultados de búsqueda de forma más rápida y detallada y, como fin último, competir con el máximo exponente de este mercado. Desde hace más de dos décadas, Google domina el sector de las búsquedas en la red, con una cuota del 92 %, de acuerdo con datos de Statista que recoge Efe. Bing es segundo con un 3,02 %.
Ante esta amenaza que se cierne sobre Google como fuente primordial de las consultas digitales, la compañía ha activado un «código rojo» y está revisando de arriba a abajo los engranajes de su estrategia de inteligencia artificial. Sus fundadores, Larry Page y Sergey Brin, han participado en el desarrollo de un plan que pretende dotar al buscador más popular de nuevas características propias de un robot de conversación. El próximo miércoles 8 desvelará sus avances y proyectos durante un acto que será retransmitido en directo en YouTube.
«Estamos reimaginando la manera en que la gente busca, explora e interacciona con la información, haciéndola más natural e intuitiva que nunca para que encuentres lo que necesitas. [...] Estamos abriendo un mayor acceso a la información para las personas de todo el mundo, a través de la búsqueda, mapas y más», adelantan desde Google.
Una de las herramientas en las que trabaja la compañía de Alphabet como respuesta a OpenAI es el chatbot llamado Apprentice Bard, que tiene un funcionamiento similar al de ChatGPT: los usuarios pueden hacer preguntas y, como resultado, obtienen respuestas detalladas y redactadas como si hubiesen sido fruto de una conversación con una persona. Este producto utiliza la tecnología de conversación Languaje Model for Dialogue Applications (LaMDA).
También el motor de búsqueda chino Baidu ha anunciado la puesta en marcha de un servicio de chatbot con características similares a las de ChatGPT.
Google considera que la inteligencia artificial generativa, basada en el aprendizaje automático y capaz de mantener conversaciones y resolver dudas, es el «nuevo campo de batalla» de las empresas tecnológicas.
En enero, en el marco del Foro Económico de Davos, el presidente ejecutivo de Microsoft, Satya Nadella, subrayó que esta es la «edad dorada de la inteligencia artificial», un recurso al que definió como el «copiloto» que ayudará a la gente «a hacer más con menos».
El vicepresidente de Microsoft, Brad Smith, publicó hace unos días un informe en el que reflexiona sobre el impacto de la inteligencia artificial y la necesidad de «abordar de manera responsable y efectiva tanto las promesas como los peligros que se avecinan». «La IA impulsará la productividad y estimulará el crecimiento económico. Reducirá la monotonía en muchos trabajos y, cuando se utilice eficazmente, ayudará a las personas a ser más creativas en su entorno laboral y ejercerá un efecto positivo en sus vidas».
Smith subraya la idea de la velocidad con que se ha producido este enorme salto tecnológico: «Las innovaciones en IA que esperábamos para el 2033 llegarán en el 2023».