Mar García Puig, diputada de En Comú Podem:  «Acabé de parir y me volví loca»

Irene Dalmases BARCELONA/EFE

SOCIEDAD

Irene Dalmases | EFE

En «La historia de los vertebrados», la política catalana cuenta su experiencia tras dar a luz a gemelos de forma prematura: «Sufrí una crisis de locura, un término que no rechazo»

25 mar 2023 . Actualizado a las 13:02 h.

Editora en excedencia, diputada en el Congreso por En Comú Podem desde el 2015, Mar García Puig se estrena como escritora con La historia de los vertebrados, una novela de autoficción que no deja indiferente, en la que narra lo que le ocurrió después de parir a sus gemelos: «Me volví loca».

En una entrevista con Efe, explica que el 20 de diciembre del 2015, justo el día en que se convirtió en parlamentaria, parió de forma prematura a sus gemelos, un niño y una niña, y pasó «de no ser madre a serlo, de no ser una persona pública a serlo», viviendo al cabo de unas horas «una crisis de ansiedad».

Fue, agrega, «una crisis de locura, un término que no rechazo, y que me lleva a formar parte de este grupo de mujeres que a lo largo de la historia han sufrido experiencias parecidas», y que refleja en este libro híbrido que ya ha recibido elogios de autores como Enrique Vila-Matas, Marta Sanz, Katixa Agirre o Luna Miguel.

Publicado en castellano por Random House y en catalán por La Magrana, cuenta a lo largo de casi 300 páginas su experiencia en su estreno de la maternidad, después de haber recibido un diagnóstico de infertilidad fruto de una endometriosis «demasiado tiempo infravalorada», sus primeros pasos por los pasillos del Congreso, buceando, además, por diferentes casos históricos de mujeres que vivieron situaciones parecidas en la Inglaterra victoriana y en otros momentos de la Historia.

Cuando se le pregunta sobre cómo definiría el libro, asevera:«Más allá de tratar un tema obvio de maternidad, que es universal, me gusta decir que es un libro sobre la locura, que trata sobre el amor, sobre diferentes tipos de amor, desde el romántico, al del padre hacia sus hijos, o el que se recibe de familia y amigos, una red que a mi me sostiene y me salva de este episodio».

El lector conocerá todo lo que sintió en el mismo hospital, con los dos niños prematuros en una incubadora cuatro plantas más abajo, en un momento «en el que el diablo campa a sus anchas por mi habitación. Ninguna autoridad médica es capaz de echarlo», tal como deja por escrito.

Precisa que todos los historiales médicos que cita, tanto los que le atañen a ella o a su familia, como los de las otras mujeres que aparecen «no son inventados, no les he añadido una coma, porque no quería inventar nada, por ellos mismos, además, son pura literatura».

En los capítulos en los que se centra más en los primeros meses de la legislatura, en el 2016, «hay una flexibilización de los tiempos, pero todo el relato de mi terapia posterior, con mi terapeuta, con el que mantengo una muy buena relación, de la sanidad pública, es también real y podría verse como un ensayo».

Convencida de que la política es «la forma más útil para contribuir a un mundo mejor», tampoco rehuye que un libro como este puede «hacer mucho para cambiar realidades políticas», en un momento en el que, aunque ha habido cambios respecto a épocas anteriores, «todavía en la política institucional encuentras resistencias».

Feminista convencida, tal como refleja en el libro, cree que puede haber una «decepción» que es «transversal» en muchas mujeres políticas, por cómo funciona todavía hoy la política institucional. «Aunque yo pertenezco a un grupo parlamentario que quería hacer las cosas diferentes y algunas han salido y otras no», dice.

Sin embargo, no quiere que se le atribuya un «papel victimista» porque, a pesar de lo complicado que es conciliar, «ser diputada ofrece muchos privilegios con respecto a otras mujeres, con situaciones sociales o laborales muy duras».

Tanto la terapia, como haber escrito el libro, espera Mar García Puig que hayan contribuido a superar ese momento vivido hace más de siete años, en lo que en tiempos pretéritos se denominó «locura puerperal», «manía láctea», «melancolía de embarazo», o «locura de lactancia».