El tercer capítulo de la docuserie sobre la vida de la vedete ha sacado a la luz algunos de los episodios de malos tratos que vivió durante su matrimonio, e incluso cuando ya no vivía con el domador: «A mí Ángel me ha pegado muchas veces, pero los malos tratos psíquicos fueron peores que los físicos»
28 abr 2023 . Actualizado a las 15:07 h.Las confesiones de Bárbara Rey en Una vida Bárbara vuelven a sorprender. Antena 3 emitía en la noche del miércoles el tercer capítulo de la docuserie que narra la vida de la vedete. Bajo el título Bárbara y Ángel, la actriz narra cómo fue el inicio de su relación con Ángel Cristo, pero también cómo fue la caída a los infiernos. Al principio, la actriz asegura que lo suyo fue idílico. «Ángel tenía una cara preciosa. ¿Que era bajito? Pues sí. Más manejable. A mí no me importaba. Él tenía algo de complejo porque a veces llevaba botas con un poco de plataforma, pero a él no le importaba que llevara unos tacones de palmo. A él le encantaba presumir de mí. Él, conmigo, no podía ser más encantador».
La boda
Fue en enero de 1980 cuando Bárbara Rey y Ángel Cristo anunciaron su enlace. «Aquello empezó a llenarse cuando salió la noticia de que éramos novios», dice la vedete sobre la actividad en el circo. Bárbara recuerda además su boda como una acontecimiento «tremendo». Un enlace que se celebró en la propia carpa. «Fue maravilloso. Su regalo de boda fue un brillante en una cosa lacrada del instituto gemológico. Me vino bien porque en un momento difícil de mi vida, lo vendí».
Tras la fiesta, Bárbara asegura que algo cambió en la actitud del domador. Cristo empezó a quejarse ya en la habitación del hotel en la que pasaron su noche de bodas. «Qué distinto es a hace horas», recuerda haber pensado.
Tras volver del viaje de novios «él ya no quería que siguiese trabajando. Quería que estuviese con él». Por voluntad del domador, la actriz comenzó a trabajar en el circo, aunque de primeras renegó. «Yo soy actriz, y no se me notaba, pero iba "destrozaíta"», dijo sobre el miedo que le daba actuar con elefantes.
Así fue como la pareja empezó a hacer fortuna, pero también el momento en el que todo se torció. Según su testimonio, Ángel Cristo le pegó la primera bofetada tras relatarle ella misma que se había encontrado a Paquirri en el aeropuerto. La vedete y el torero habían tenido una breve relación tiempo antes. «Te vas a Madrid para verte con tu amante», le dijo Cristo. Ella asegura que el nivel de control llegó a un punto en el que el domador supervisaba sus entrevistas. «A mí Ángel me ha pegado muchas veces, pero los malos tratos psíquicos fueron peores que los físicos. Los psíquicos han sido demoledores: "no vales una mierda, no vales para nada, estás fofa, solo te queda ponerte de puta en una esquina"...», relata. «Yo dejé de ser quién era», sentencia.
Su primer embarazo
«La noche en la que me quedé embarazada, mi marido casi me mata. No sé si dije algo que no le gustó. No tengo ni idea», dice sobre una escena de gritos en su propia casa. «Qué miedo le tenía. Pasé todo el embarazo con nervios porque él no dejaba de preguntar con quién había salido yo años atrás», cuenta en el tercer episodio.
La vedete asegura que además en ese momento Ángel Cristo tenía una relación extramatrimonial con una mujer muy cercana a la familia. El domador ni siquiera estuvo presente en el parto de su hija Sofía ya que se encontraba fuera de España. La conoció al día siguiente en el hospital, adonde le acompañó su amante. «Él se marchó a Argelia y cogió un avión a primera hora de la mañana. Llegó por la tarde con su amante, cogió a la niña, la levantó y dijo que no había visto una niña tan fea en su vida».
La primera bofetada que recibió Bárbara Rey de Ángel Cristo: “No sabía lo que estaba pasando” #UnaVidaBárbara
— Antena 3 (@antena3com) April 26, 2023
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Su relación con el rey
«Mucha gente piensa que tuve una relación con él durante mi matrimonio. Y eso es imposible», dice haciendo referencia a Juan Carlos I y al tiempo que le ocupaba el circo. «Yo estaba siempre con mi marido. Si hubiese tenido cualquier escarceo, yo no estaría contando esta historia. Me habría ido antes que él de este mundo», explica sobre los celos de su marido.
Otro de los peores acontecimientos fue cuando Paquirri falleció. «No me pude aguantar y lloré y me dio una bofetada que por poco me parte el cuello, los dientes y todo». Esa misma noche, el domador salió de casa durante la madrugada, algo que hizo sospechar a la vedete. Bárbara Rey siguió a su marido y se dio cuenta de que «alguien le estaba dando algo». Ese fue el comienzo de sus adicciones. El domador, que sufría fuertes dolores por sus problemas de espalda, se enganchó a las drogas. «Yo trataba de que, con el tiempo, fuese cambiando, pero no. No lo pude conseguir», recuerda. Cristo llegó a pedirle el divorcio, algo que a Bárbara le pareció la mejor solución y motivo de esperanza, pero el infierno solo cambió de escenario. «Yo vivía sola, pero él venía cuando le daba la gana y me insultaba. Le daba una patada a la puerta de mi dormitorio y me violaba escupiéndome en la cara y llamándome puta». Además, la vedete aseguró que se sintió desamparada -«nadie me ayudaba»- y manifestó que tuvo que renunciar a todo si quería alejarse del domador. «Me hizo renunciar a los bienes, me quedé a vivir con los niños y me pasaba una pensión para lo básico».