El aire tropical ya alcanza los polos de la Tierra

SOCIEDAD

Imagen del derretimiento en el glaciar Sermeq, en Groenlandia
Imagen del derretimiento en el glaciar Sermeq, en Groenlandia HANNIBAL HANSCHKE | REUTERS

Los ríos atmosféricos que riegan de lluvia a Galicia están llegando hasta los extremos del mundo

10 may 2023 . Actualizado a las 09:17 h.

En la primera semana de febrero del 2020, antes de que el mundo estuviese a punto de declarar la pandemia por el covid-19, hubo un suceso que fue noticia en todos los periódicos del mundo. La estación meteorológica en la base argentina de Esperanza, en la Antártida, registró 18,1 grados. Se trata del valor más alto que se ha medido en el continente helado de que existen datos.

En esa semana cayeron, además, otros muchos registros históricos en otros puntos. Por ejemplo, en la estación que la Aemet tiene instalada en la isla Decepción, donde se encuentra la base antártica española Gabriel de Castilla. La máxima alcanzó 13,1 grados.  El origen de ese evento extremo fue una masa de aire tropical que consiguió llegar hasta el polo sur a través de un río atmosférico, un fenómeno bien conocido por los gallegos ya que riega la comunidad de lluvia cada invierno. Aquel episodio en la Antártida demostró que el área de influencia de este mecanismo de transporte de humedad está aumentado. 

Por si había dudas, un estudio publicado en Nature Communications acaba de demostrar que los ríos atmosféricos juegan un factor clave en las complejas condiciones que aceleran actualmente el derretimiento de los glaciares en el norte de Groenlandia.

«La capa de hielo de Groenlandia ha visto una aceleración en el derretimiento de los glaciares en los últimos 30 años. Nuestra investigación muestra los principales impactos que los ríos atmosféricos pueden tener sobre la parte nordeste de la capa de hielo», asegura Kyle Mattingly, investigador del Centro de Ingeniería y Ciencias Espaciales de la Universidad de Wisconsin-Madison.

Las condiciones de calentamiento comienzan con los ríos atmosféricos que impactan en el lado noroeste de Groenlandia y se mueven hacia el este, creando lo que se conoce como efecto Foehn. Este fenómeno, otra viejo conocido del clima gallego, ocurre cuando el aire húmedo se encuentra con una elevación como una montaña o la empinada costa de la isla.

A medida que ese aire húmedo asciende, se condensa y puede precipitar en forma de lluvia o nieve, liberando calor a la atmósfera. «Este calentamiento se amplifica sobre la corriente de hielo del nordeste de Groenlandia, se extiende hacia el interior y drena una gran parte de la capa de hielo hacia el océano. El aumento del aire cálido de los ríos atmosféricos da como resultado charcos de agua de deshielo y ríos que absorben más luz solar que el glaciar cercano», explica el científico.