Loreen responde a las acusaciones de plagio por «Tattoo»: «Es inevitable inspirarse en otros creadores»
SOCIEDAD
Rubén Moreno y Marc Escudero, compositores españoles del éxito de los 90 «Flying Free», estudian acciones legales contra la canción ganadora del festival de Eurovisión. Un tema que también guarda sospechosas semejanzas con uno de los singles más famosos de ABBA y con una canción pop ucraniana
16 may 2023 . Actualizado a las 22:36 h.Ya es un clásico. Canción que consigue el éxito, canción a la que se le buscan todo tipo de similitudes con temas anteriores hasta sobrevolar sobre ella el fantasma del plagio. La última acusada de copiar a canciones anteriores ha sido la flamante ganadora del Festival de Eurovisión del 2023, Loreen, cuyo tema Tattoo podría enfrentarse incluso a la denuncia formal de dos compositores españoles.
Han sido DJ Ruboy (Rubén Moreno) y DJ Skudero (Marc Escudero), que no descartan acciones legales por plagio contra Loreen al entender que su Tattoo tiene evidentes semejanzas con el tema más famoso en el que colaboraron como pinchadiscos de la discoteca Pont Aeri, Flying Free, una melodía de música electrónica, lanzada en el 1999 y que se convirtió en todo un éxito en las pistas de baile de toda España y que llegó a lo largo de los años a muchos otros países. Lo cierto es que el beat electrónico del principio de Flying Free y la base inicial de Tattoo sí tienen un parecido reseñable, aunque el dúo de compositores está ahora en manos de los abogados para estudiar si es posible demostrar que la de Loreen es una copia de su canción.
La de Flying Free no es la única semejanza con temas anteriores que se le ha encontrado al Tattoo de Loreen. Uno de los primeros parecidos que la gente detectó fue con un icónico single de, precisamente, sus paisanos suecos más famosos, ABBA, titulado The Winner Takes it All, de 1988. Los parecidos en este caso se ciñen a las primeras estrofas de Tattoo, que presentan una melodía muy semejante a las del cuarteto más famoso de Suecia, y que también ganó el Festival de Eurovisión hace ahora casi 50 años.
Tras los beats iniciales y la primera estrofa, llega el turno del puente, esos versos que van justo antes del estribillo, y que, como no podía ser de otra manera, muchos también ven sospechosamente parecidos a otro tema, V Plenu, de la cantante ucraniana Mika Newton. Una parte que a muchos también les recuerda al Easy on Me de Adele, aunque en este caso las semejanzas parecen más cogidas por los pelos.
Y, ¿qué pasa con el estribillo? Por supuesto, Loreen también ha sido acusada de plagio en este fragmento, aunque, en este caso, la víctima sería ella misma, ya que desde el lanzamiento de Tattoo, sus mayores críticos decían que era prácticamente igual al tema que le había dado el triunfo en el Festival de Eurovisión del 2012, el famosísimo Euphoria.
La respuesta de Loreen: «Es inevitable»
La cantante sueca ha asegurado que es posible que existan similitudes entre Tattoo y otras canciones, aunque, de haberlas, habría sido de forma «inconsciente». «Todos nos inspiramos entre todos, y es de una forma inconsciente», ha dicho la artista en una entrevista a la radio catalana RAC1 después de su victoria, y ha añadido que «es inevitable inspirarse en otros creadores» a la hora de componer. Algo que, en todo caso, es «bonito y encantador», según la artista: «Pienso que mi arte inspirará a otras personas a crear alguna cosa propia que saldrá desde sus mismos adentros».
Ella misma explicaba antes de su actuación en Liverpool cómo había sido la gestación de la canción: «Cuando llegó, era solo una demo, pero era una melodía viva, y cuando nos metimos en el estudio, lo hicimos sin ningún plan previsto». Pero negó que hubiera plagio ni hacia Flying Free ni hacia The Winner Takes It All: «Solo una vez acabada la canción nos señalaron las similitudes, pero entonces pensamos que si las cosas pasan es por algo», argumentó en su entrevista a la agencia EFE.
Loreen se siente tranquila con respecto a las acusaciones, aunque en caso de prosperar la denuncia, la cantante podría tener graves problemas. El mayor de ellos, por supuesto, desde el punto de vista legal, ya que el plagio está perseguido por la ley. Pero también como ganadora de Eurovisión, ya que el festival es muy estricto en sus normas, y a las canciones presentadas se les exige ser originales en el momento de su presentación a la competición. En caso de que suceda lo peor, aunque es altamente improbable, la artista sueca podría perder su micrófono de cristal, que pasaría al segundo clasificado, el finlandés Käärijä.