El universo «Sálvame» se apaga con el adiós del «Deluxe» a Telecinco

J. Moreno MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

Kiko Hernández, Terelu Campos, Kiko Matamoros, María Patiño, Carmen Borrego y Pilar Vidal, en el último «Deluxe»
Kiko Hernández, Terelu Campos, Kiko Matamoros, María Patiño, Carmen Borrego y Pilar Vidal, en el último «Deluxe» Telecinco

El programa se despidió para siempre de la cadena e invitó a Mercedes Milá, quien reivindicó el formato ante la cúpula de Mediaset que decidió cancelarlo

17 jul 2023 . Actualizado a las 10:49 h.

No fue una invitada más. La periodista Mercedes Milá fue la gran entrevistada en la despedida de Viernes Deluxe, la versión algo más glamurosa del universo Sálvame que aguantó un poco más en la parrilla tras la desaparición de la edición diaria. El magacín rosa dio su último adiós el pasado en Telecinco con la sensación de que la cadena ya había cambiado. Como esa especie de reencuentro con tu expareja en el que notas que ya no todo fluye como antes. El programa se fue deconstruyendo poco a poco literalmente, pues operarios de mudanza fueron desmontando en directo los últimos elementos de la escenografía de un plató prácticamente intacto desde que se construyó hace catorce años. Y en medio estaba la Milá, tan reivindicativa como siempre y sin pelos en la lengua, con un mensaje que parecía dirigido a la cúpula de Mediaset. «Si no os han sabido entender aquí alguno, no os preocupéis, os entenderán allí otros», avisaba señalando hacia arriba, en una clara referencia a las altas esferas del grupo de comunicación.

La despedida del Deluxe supo a poco. Faltaban sus grandes referentes. El presentador titular, Jorge Javier Vázquez, no estaba presente tras su retirada momentánea de la televisión para cuidar su salud. Tampoco apareció Belén Esteban, la colaboradora que mayores índices de audiencia dio al programa en prime time con sus «belenazos». Su reaparición en televisión tras someterse a una operación estética pulverizó todos los récords del formato: más de 3,1 millones de espectadores y un 26 % estuvieron pendiente de su nueva cara en diciembre del 2009. No estaba presencialmente otra de las veteranas, Lydia Lozano, aunque el programa sí jugó con su presencia a través de un holograma, en el que intervenía como una más en el plató e incluso bailaba sus conocidos como chumineros. El último Deluxe comenzó desde los exteriores de Mediaset con el resto de los colaboradores añorando una etapa gloriosa en la que el formato traspasaba la pequeña pantalla y asustaba a la competencia ante sus grandes resultados de audiencia. El programa reinventó a su manera la forma de entender la crónica social en televisión. Sin embargo, el ciclo se agotó y Telecinco aceleró para abrir una nueva etapa sin definir muy bien el modelo de programación que quiere. La despedida del formato fue seguida por un 11,7 % de la audiencia, sin ni siquiera llegar a los 900.000 espectadores y por detrás del liderazgo de Tu cara me suena (14 % y 1.171.000 espectadores), que apostó por un recopilatorio de los mejores momentos de la edición, retrasando la final hasta el próximo viernes.

Maestras de ceremonias

María Patiño y Terelu Campos fueron las maestras de ceremonias de la despedida definitiva del que fuera el buque insignia de Mediaset durante la última década. El programa que siempre estaba ahí para cubrir los huecos de Telecinco. Cumplía y rendía con buenas cuotas de pantalla. El grupo de comunicación anunció su cancelación y el traslado de Ana Rosa Quintana a las tardes de la cadena. Muchos vieron que detrás de la decisión había un tema ideológico, algo que compartió la propia Milá en directo. «Creo que es un tema ideológico. No es que ya que se acabe un programa. No, aquí hay que militar. Y por eso estoy esta noche aquí, porque yo milito con la libertad, con la opinión, con la creatividad, con el espectáculo y el trabajo bien hecho», defendió la que fuera presentadora de Gran Hermano. Incluso hizo una petición a la audiencia de cara a las próximas elecciones generales del 23 de julio. «Antes de irme quiero decir a la gente que lea, se informe y que vote, por favor. Que haga lo que sea por votar. Nos estamos jugando la vida», sentenció.

En las cuatro horas que duró la última entrega, Deluxe también aprovechó para mostrar por qué era uno de los programas más gamberros de la televisión. No faltó el polígrafo a sus colaboradores y también una entrevista personal a Conchita Pérez, su artífice. La última invitada fue Leticia Sabater que, a su vez, es el personaje popular que más veces ha sido entrevistada en el programa: cuarenta veces pasó por el plató de Sálvame, sumando más de sesenta horas en pantalla. Ella misma reconoció que estas intervenciones la habían ayudado económicamente en momentos en los que necesitaba dinero.

Posteriormente, las presentadoras tomaron las riendas del último tramo. Apagaron las luces del Deluxe, pusieron el cartel de «Traspasado», deseando suerte a los próximos inquilinos, y se subieron a una camioneta conducida por Conchita. «¿Entonces el Deluxe va a morir?», preguntaba Patiño. «No, María. El Deluxe está de viaje», contestó Terelu. El vehículo arrancó y el programa acabó con la promesa de que Sálvame seguiría entre nosotros. Lo próximo y más inmediato, el reality que preparan sus colaboradores para Netflix.