Mutilaciones, decapitaciones y «stickers» pedófilos, entre las «salvajadas» del chat de menores de Cantabria

La Voz

SOCIEDAD

Dos personas frente a la entrada del colegio San José de Astillero, en Guarnizo, El Astillero, Cantabria. El centro lleva dos denuncias por la difusión en un chat de alumnos de fotos y vídeos de pornografía infantil.
Dos personas frente a la entrada del colegio San José de Astillero, en Guarnizo, El Astillero, Cantabria. El centro lleva dos denuncias por la difusión en un chat de alumnos de fotos y vídeos de pornografía infantil. C. Ortiz | EUROPA PRESS

Las familias denuncian un segundo grupo de WhatsApp, en el que hay más de cien hombres, incluidos adultos «desconocidos para los niños»

25 sep 2023 . Actualizado a las 18:49 h.

Las imágenes que se compartían en el chat de menores de un centro educativo de Astillero (Cantabria) que investiga la Guardia Civil por su contenido sexual y agresivo «revolvían el estómago», según los denunciantes. En las conversaciones de WhatsApp abundaban los insultos, vejaciones a otros niños y amenazas de palizas con stickers de contenido pedófilo, mutilaciones, disparos o decapitaciones, entre otras «salvajadas». «No sé cuánto llevan expuestos a este tipo de material, pero están normalizando unas cosas aberrantes», lamenta una de las denunciantes.

Además del contenido sexual y violento que se compartía en ese chat, en el que participaban menores de 14 y 15 años, las familias han denunciado la existencia de un segundo grupo, en el que había más de cien hombres, incluidos adultos «desconocidos para los niños». A través de este grupo, que según los denunciantes coadministraba el menor que enviaba ese contenido, uno de los niños afectados recibió llamadas de adultos preguntándole sus datos personales y donde vivía.

Aseguran también que sus hijos han sufrido amenazas por parte del menor implicado, después de que mostraran su disconformidad con lo que se compartía por ese grupo. En paralelo a la actuación policial, la Fiscalía de Menores de Cantabria también investiga los hechos.

El centro ha abierto un expediente de investigación de carácter interno que está supervisando el servicio de inspección educativa de la Consejería. Sin embargo, una de las madres que ha denunciado afea que después de poner en conocimiento de la dirección del centro los hechos, que ocurrieron a principio de curso, les manifestaron que «no podían hacer nada» y el director no se ha puesto en contacto con ellos.