Escolares y padres de alumnos coinciden en que utilizar el móvil en el instituto «non é necesario»
16 dic 2023 . Actualizado a las 22:01 h.Valeria Rodríguez Colferai (16 años) es alumna del instituto Alfredo Brañas de Carballo. En este centro lleva años prohibido el uso de móviles, con una excepción, los alumnos de bachillerato y el ciclo formativo de Comercio pueden utilizarlos a la hora del recreo. Eso cambiará en cuanto se publique la nueva norma, según dijo la directora, Mónica Mariño.
Valeria considera que la medida de no permitir el uso de teléfonos en el centro es correcta. Le parece «bastante ben», lo ve como algo justo. «Non o boto de menos, penso que non é necesario», explica. «Mentres estou no centro lévoo no peto e cando saio cólloo. No recreo non nos deixan telo, pero tampouco o usamos», detalla la estudiante.
En su clase tienen un grupo de WhatsApp que ella también utiliza «para pedir algunha cousa» y hablar con sus compañeros. El resto del tiempo el aparato suele ser fuente de entretenimiento, «para ver algún vídeo».
También recuerda que en el centro lo utilizan cuando lo demanda el profesor en algunas actividades. Se trata de «momentos puntuais, para facer algún xogo de reforzo ou complemento na clase».
Como Valeria son muchos los alumnos y las familias concienciadas con los peligros que entraña el mal uso o el abuso de los dispositivos electrónicos.
«Estoy encantada de que quiten los móviles de los colegios», reconoce la madre de una familia con hijos en dos centros educativos de Ferrol, el instituto Montojo y en el colegio Isaac Peral. El endurecimiento de restricciones que propone ahora la Xunta le repercute principalmente a su hija mayor, en edad adolescente. Ella no cuenta con móvil, pero no es lo habitual entre sus compañeros, que sí que tienen.
En el Montojo impusieron hace ya una semana la prohibición de usar el móvil hasta en los recreos. «Estoy encantadísima, porque al final se distraen. Aunque no se pueda, lo sacan entre clase y clase, se graban vídeos... Se generan muchos problemas. Sin él, te los evitas», valora.
Alivio para profesores y padres
Que el móvil sea un objeto ya habitual para muchos pequeños en edad adolescente hace que los que no lo tienen empiecen a pedirlo. La medida que prohíbe su uso en los colegios la ve tan beneficiosa para los estudiantes como para los profesores, que se evitan también un punto de conflicto. Y apunta a que, si es necesario contactar con un hijo o a este le ocurre algún problema en horario lectivo, siempre se recurrió al contacto a través de los centros educativos sin problemas, por lo que esta madre no ve vital que los pequeños porten móviles en el recinto.
Antón, que tiene 13 años y estudia 2.º de ESO en Vilagarcía, lleva el móvil al instituto, pero normalmente lo tiene apagado desde que empiezan las clases hasta la hora de la salida. En ocasiones son los propios docentes los que los invitan a usar el móvil en clase para determinadas actividades. Nunca les dijeron que el móvil esté prohibido, aunque todos los años, el primer día, les dicen que no se puede usar. En el centro, alguna vez ha visto a profesores mandar a los alumnos guardar los móviles en el recreo.