Detienen a un médico por «avalar» el uso de ayahuasca y sapo bufo en rituales neochamánicos
SOCIEDAD
La Policía Nacional ha desmantelado una red con sedes repartidas por España
18 ene 2024 . Actualizado a las 08:45 h.La Policía Nacional ha desmantelado una red especializada en celebrar rituales neochamánicos donde suministraban a los asistentes sustancias prohibidas como ayahuasca, sapo bufo, rana kambó y peyote. Hay 18 detenidos como presuntos integrantes de la organización, que tenía sedes repartidas por España a las que denominaban «epicentros de evolución interior».
A los arrestados, entre los que se encuentra un médico y su pareja, que se hacía pasar por licenciada en Medicina, se les imputa un delito de organización criminal. A algunos, además, se les atribuyen delitos de trata de seres humanos, intrusismo profesional, contra los derechos de los trabajadores, contrabando e infracción a la ley de extranjería.
La operación, a cargo de la Comisaría General de Información (CGI), que tiene un grupo especializado en sectas, y de Vigilancia Aduanera, se ha simultaneado en las localidades madrileñas de Fuente el Saz del Jarama (4 detenidos), Valdetorres del Jarama (1), Madrid capital (10) Ibiza; así como en Málaga (1), Ibiza (1) y Lloret de Mar (1).
La investigación comenzó cuando agentes especializados en la lucha contra las sectas destructivas detectaron la presencia de un entramado comercial que promocionaba a través de redes sociales y sitios web la celebración de rituales neochamánicos. En estos anuncios se prometía una mejora en la salud física y emocional de los participantes gracias al consumo de diferentes psicoactivos.
Los agentes pudieron comprobar que la organización mantenía una sede en la selva colombiana donde disponía de los medios y materia prima necesaria para elaborar el brebaje de la ayahuasca, que posteriormente introducía clandestinamente en España a través del aeropuerto de Madrid-Barajas-Adolfo Suárez mediante «mulas» o simulando importaciones de otros productos, según ha informado la CGI. Además, fueron detectados numerosos envíos de paquetería dirigidos a miembros del grupo que contenían mescalina y ayahuasca.
La organización contaba con sedes llamadas «epicentros de evolución interior» distribuidas en las provincias de Madrid, Barcelona, Málaga, Granada e Ibiza, así como en diferentes países de Europa (Francia, Italia, Bélgica, Irlanda, Finlandia, Rumania, Malta, principalmente) y en otras partes del mundo (México, Colombia y Turquía), en las que celebraban dichos rituales y donde residían los miembros de la red, que realizaban largas jornadas de trabajo en condiciones irregulares.
Los arrestados, al amparo de un complejo entramado mercantil, promocionaban y organizaban internacionalmente múltiples retiros denominados de «evolución interior», donde suministraban a los asistentes sustancias psicoactivas prohibidas y peligrosas para la salud, tales como ayahuasca, sapo bufo, rana kambó y peyote. El consumo era supervisado presuntamente por un médico colegiado y su pareja para «avalar» la idoneidad de la práctica, según las mismas fuentes. Para ello, disponían de una plataforma on line para distribuir dichas sustancias.
El líder de la organización, fallecido durante la instrucción de la causa, era considerado por sus adeptos como un maestro espiritual o gurú. A éste, además, se imputaron delitos contra la libertad e indemnidad sexual y de favorecimiento a la inmigración clandestina.
En los registros de la operación, denominada Kambo, se sorprendió a parte de los investigados iniciando la celebración de un ritual, momentos antes de facilitar los referidos psicoactivos a un numeroso grupo de asistentes.
Además de los ocho registros, se han interceptado numerosos envíos postales llevados a cabo por el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria en el aeropuerto de Madrid Barajas, en los que se han intervenido 24.000 euros y diferentes monedas extranjera en efectivo, un kilogramo de mescalina, más de 60 kilos de ayahuasca, otras sustancias psicoactivas e instrumentos para su consumo. También un datáfono, material informático y de producción audiovisual, numerosos teléfonos móviles, dos drones y un vehículo de alta gama, entre otros efectos.
Según los investigadores, este tipo de sustancias psicoactivas son habitualmente utilizadas en el marco de ceremonias practicadas por las denominadas sectas new age o de la nueva era, concretamente en rituales de corte neochamánico. El hecho de que la administración se acompañe de diversos estímulos como parafernalia ambiental, cantos, luces o incienso ayuda a inducir estados disociativos de la consciencia que modifican los comportamientos esperado, por lo que los psicoactivos se convierten en un instrumento utilizado por el chamán para la captación y control coercitivo del grupo. Además, estas sustancias también serían utilizadas como terapia sustitutiva de la medicina convencional.
Los especialistas encargados de estas investigaciones mantienen habilitado el correo electrónico sectasdestructivas@policia.es para que cualquier ciudadano pueda informar de forma anónima y confidencial sobre hechos relacionados con las actividades de grupos de corte sectario.