Un entrenador del Fulham femenino asegura que a Al Fayed: «Le gustaban las chicas jóvenes y rubias»

La Voz LONDRES / EFE

SOCIEDAD

Luke MacGregor | REUTERS

La Fiscalía británica rechazó en dos ocasiones acusar al magnate por delitos sexuales. El exjefe de protección de la realeza británica recuerda que advirtió a la familia real británica de la reputación del antiguo dueño de Harrods antes de que Diana de Gales y sus hijos se fuesen de vacaciones con Dodi Al Fayed

22 sep 2024 . Actualizado a las 12:26 h.

Un exentrenador del equipo femenino del Fulham aseguró que tomaron medidas de protección para evitar que las jugadoras se quedasen a solas con el antiguo dueño del club, Mohamed Al Fayed, acusado por decenas de mujeres de agresiones sexuales.

En declaraciones a la BBC, Gaute Haugenes, que entrenó al equipo entre el 2001 y el 2003, explicó que el cuerpo técnico era consciente de que al difunto magnate egipcio, propietario también de los grandes almacenes Harrods, «le gustaban las chicas jóvenes y rubias».

Como medida de precaución, los técnicos prohibieron a las futbolistas quedarse a solas con Al Fayed, dueño del club durante 16 años. El pasado viernes, el club del oeste de Londres se mostró «profundamente preocupado» en un comunicado por las informaciones aparecidas sobre el comportamiento de Al Fayed como un depredador sexual con las trabajadoras de Harrods.

Pese a que no ha habido denuncias hasta ahora en el seno del Fulham, un grupo de abogados que defienden a víctimas del empresario aseguraron el viernes en una rueda de prensa que es «improbable» que no haya habido más mujeres que hayan sufrido asaltos sexuales en otros ámbitos.

Los abogados afirmaron que el fallecido multimillonario «era un monstruo» al que ayudó «un sistema interno establecido» en Harrods, los grandes almacenes de lujo londinenses que poseyó entre 1985 y  el 2010.

Natacha, una de las mujeres agredidas por Al Fayed
Natacha, una de las mujeres agredidas por Al Fayed Mina Kim | REUTERS

Estos letrados ofrecieron una rueda de prensa, junto con una de las exempleadas denunciantes —Natacha—, después de que una veintena revelara los abusos a los que fueron sometidas en un impactante documental difundido el jueves por la BBC.

La Fiscalía británica rechazó en dos ocasiones acusar a Al Fayed 

Fiscalía de la Corona británica (CPS, por sus siglas en inglés) ha reconocido que rechazó hasta en dos ocasiones presentar cargos por delitos sexuales contra el fallecido empresario Mohamed al Fayed, al considerar que no había pruebas sólidas contra él.

Un portavoz del CPS explicó a medios británicos que la Policía Metropolitana trasladó sus investigaciones sobre Al Fayed a la Fiscalía por «agresión indecente» contra una menor en el 2008 y por violación en el 2013, pero en ambos casos se desechó acusar formalmente al entonces dueño de los grandes almacenes Harrods. «Para presentar una acusación, el CPS debe tener confianza en que hay una perspectiva realista de condena. En cada ocasión, nuestros fiscales examinaron cuidadosamente las pruebas y concluyeron que ese no era el caso», dijo el portavoz.

El empresario egipcio, que murió el año pasado a los 94 años, ha sido acusado por decenas de mujeres de abusos sexuales cuando trabajaban para Harrods. Al Fayed fue acusado en el 2008 de «agresión indecente» contra una menor de 15 años, un caso que un año después la CPS descartó por contradicciones en las pruebas.

También fue investigado por la violación de una mujer en el 2013, por la que tampoco el CPS llegó a presentar cargos. La Fiscalía también pidió a la Policía investigar al magnate en el 2018, 2021 y 2023, pero en ninguna de las ocasiones se presentó evidencia suficiente para acusar formalmente a Al Fayed, padre de la última pareja que tuvo la difunta Diana de Gales, que falleció con ella en accidente de tráfico en París.

Los abogados de las víctimas que hicieron públicas las agresiones sexuales de Al Fayed en un documental de la BBC aseguraron ayer sábado que ya han recibido más de 150 consultas.

El exjefe de protección de la realeza dijo igualmente que alertó a la familia real sobre la reputación del empresario antes de que Diana viajase con sus hijos, los príncipes Guillermo y Enrique, a pasar unas vacaciones con su hijo Dodi. 

La princesa Diana de Gales junto a Dodi Al Fayed, hijo del magnate Mohamed Al Fayed
La princesa Diana de Gales junto a Dodi Al Fayed, hijo del magnate Mohamed Al Fayed JEAN LOUIS MACAULT

Los famosos almacenes de Londres pertenecen ahora a Harrods Ltd, una empresa propiedad de Catar a través de su fondo soberano de riqueza, la Qatar Investment Authority. Los propietarios actuales de Harrods afirmaron estar «absolutamente horrorizados» por las acusaciones y señalan que desde que empezaron a surgir en el 2023 establecieron un sistema de compensación.

Al Fayed, de origen egipcio, inmigró al Reino Unido en 1974 y ya era una figura pública muy conocida cuando se hizo cargo de los grandes almacenes Harrods en 1985.

«Combina los peores elementos de los de Jimmy Savile, Jeffrey Epstein y Harvey Weinstein»

Los abogados de las mujeres que acusan de agresión sexual y violación a Mohamed Al Fayed afirmaron  que el fallecido multimillonario «era un monstruo», al que ayudó «un sistema interno establecido» en Harrods, los grandes almacenes de lujo londinenses de los que fue propietario entre 1985 y 2010.

Estos letrados ofrecieron una rueda de prensa, junto con una de las exempleadas denunciantes, después de que una veintena revelara los abusos a los que fueron sometidas en un impactante documental difundido el jueves por la BBC.

En la rueda de prensa, el equipo legal indicó que se investigarán también posibles agresiones del potentado en otros de sus negocios, como el club de fútbol londinense Fulham, del que fue propietario entre 1997 y 2013, y el hotel Ritz de París, que poseyó desde 1979 hasta su muerte el año pasado.

Tocamientos, violaciones en viajes de trabajo, humillaciones y amenazas, además de control por parte del equipo de seguridad, fueron algunas de las vejaciones impuestas a esas trabajadoras, algunas menores de edad, que fueron obligadas a firmar acuerdos de confidencialidad o no se atrevieron a denunciar al poderoso empresario en esa época por temor a represalias.

«En mis años de experiencia nunca he visto un caso tan horrible como este», declaró el abogado Dean Armstrong, que calificó de «monstruo» al magnate de origen egipcio, fallecido en el 2023 a los 94 años.

«Combina algunos de los peores elementos de los de Jimmy Savile, Jeffrey Epstein y Harvey Weinstein», tres notorios depredadores sexuales y pederastas británico el primero y estadounidenses los otros dos, agregó.

Armstrong explicó que había en Harrods «un sistema de tráfico de mujeres para la gratificación sexual» de Al Fayed, que incluía un proceso de selección y exámenes ginecológicos invasivos, y acusó a la compañía de haber incumplido su deber de velar por la plantilla y «garantizar la seguridad en el trabajo».

El letrado reveló que su bufete ya representa a 37 exempleadas dispuestas a llevar el caso a los tribunales y espera que otras se acerquen tras ver el documental televisivo. Subrayó que su meta es «obtener justicia para las víctimas» y que va «mucho, mucho más allá del dinero».

Su colega Bruce Drummond declaró por su parte que se trata de «uno de los peores casos de explotación sexual corporativa» jamás vistos y mantuvo que Harrods «debe aceptar la responsabilidad por el daño que estas mujeres han sufrido».

El aterrador testimonio de una de sus víctimas

«Dejé claro que no quería que eso ocurriera. No di mi consentimiento. Solo quería que terminara», relató una de las mujeres, que dijo que Fayed la violó en su apartamento de Park Lane, una lujosa zona del centro de la capital británica.

«Mohamed Al Fayed era un monstruo, un depredador sexual sin ningún tipo de brújula moral», agregó, y resaltó que todo el personal estaba asustado porque «cultivaba activamente el miedo».

Gemma, una de las asistentes personales de Al Fayed entre el 2007 y el 2009, declaró  al programa Today de Radio 4 de la BBC que tenía miedo de recurrir a la Justicia mientras el magnate estaba vivo. «Incluso ahora, estas últimas semanas, tener que revivir todos esos momentos ha devuelto ese miedo. Ahora estoy aterrorizada por alguien que está muerto porque tenía ese poder sobre ti», dijo. Gemma contó que le «obligaron»' a hacerse pruebas ginecológicas para conseguir el trabajo y cree que el objetivo era comprobar que no tenía ninguna infección de transmisión sexual.

Exterior de los almacenes Harrods
Exterior de los almacenes Harrods NEIL HALL | EFE

Según dijo, Al Fayed empezó a acosarla sexualmente «inmediatamente» después de que ella empezara a trabajar, haciéndole comentarios sexuales y manoseándola, y que la violó durante un viaje a París. «En París, había guardias de seguridad patrullando la casa, había guardias de seguridad fuera de la casa, estábamos encerrados en una propiedad cerrada, habíamos sido escoltados allí ese día por la policía, así que sentí que ni siquiera podía ir a la policía», explicó. «Ni siquiera podía contemplar la posibilidad de salir del país porque él tenía mi pasaporte, así que mi única forma de irme era con él de vuelta en ese avión privado de regreso a Londres», relató.

Finalmente consiguió la ayuda de un abogado para poder renunciar a su puesto de trabajo, pero que fue un proceso difícil. «El departamento de recursos humanos durante mi proceso de salida había dicho que para poder irme en silencio y rápidamente, necesitaban que destruyera todas mis pruebas. Me ofrecieron un acuerdo, me hicieron destruir mis pruebas y tuve que firmar un acuerdo de confidencialidad para decir que nunca hablaría de ello», explicó Gema al referirse a las pruebas de los acosos sexuales.