La multitudinaria «rave» de Ciudad Real se alargará hasta el día de Reyes

J. M. L. MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

PATRICIA GALIANA | EUROPAPRESS

La macrofiesta de música electrónica organizada ilegalmente junto al aeropuerto de Ciudad Real transcurre sin incidentes, pero bajo temperaturas extremas de menos dos grados

02 ene 2025 . Actualizado a las 13:44 h.

La tercera edición de la Big Fucking Party, que arrancó en Nochevieja junto al aeropuerto de Ciudad Real, llegará a su fin el día de Reyes, tal y como ocurrió en las dos ediciones anteriores de La Peza (Granada) y Fuente Álamo (Murcia). Así lo aseguran los participantes en esta rave no autorizada que sus organizadores han convocado a través de las redes sociales y grupos de WhatsApp revelando la tarde de Fin de Año su ubicación exacta: un polígono industrial perteneciente al aeropuerto de Ciudad Real, una infraestructura que lleva años sin acoger vuelos comerciales y que hoy solo se dedica a la carga y descarga de mercancías, mantenimiento de aeronaves y vuelos privados.

La rave manchega está transcurriendo sin incidentes y bajo unas condiciones climáticas extremas, con temperaturas mínimas de dos grados bajo cero y densas nieblas que se disipan al mediodía. Los cerca de 5.000 participantes en este evento llegados en 1.500 vehículos duermen pocas horas y lo hacen dentro de coches, autocaravanas, furgonetas, camiones y, también, en tiendas de campaña arropados por mantas, edredones, sacos de dormir y todo lo que sirva para aumentar la temperatura corporal. «Estaremos aquí hasta que el cuerpo aguante», dicen los asistentes, la mayoría jóvenes y muchos acompañados por sus mascotas, llegados desde toda España y otros países como Alemania, Francia o Países Bajos.

Seguridad y «operación jaula»

Aunque la macrofiesta no ha registrado incidentes y sus participantes aseguran que es una reunión pacífica y alternativa a los cotillones de Nochevieja organizados por el sector hostelero, sí provocó problemas de tráfico en sus primeras horas, colapsando la autovía que une Ciudad Real con Puertollano. «No ha habido problemas de seguridad ciudadana y se han implementado controles en las vías de acceso para asegurar el tráfico fluido y evitar cualquier accidente», explica el subdelegado del Gobierno de España en Ciudad Real, David Broceño. Para ello, la Guardia Civil y la Policía Nacional, junto a las policías locales de Ciudad Real y Puertollano, han intensificado las labores de vigilancia y control.

El desalojo de esta macrofiesta ilegal se descarta, al igual que ocurrió en las celebradas en Granada y Murcia en los dos últimos años, ya que una acción policial en este polígono podría acarrear males mayores. Por el contrario, la estrategia es desarrollar una «operación jaula», es decir, permitir la entrada de vehículos pero no su salida y vuelta a entrar. De esta forma, a medida que se agoten sus bebidas y alimentos se espera que abandonen poco a poco. No obstante, junto a una carpa de circo y los escenarios montados y dotados de grupos electrógenos se han instalado tenderetes que venden bebida y comida rápida como pizzas, kebabs y bocadillos y que en cuestión de un par de días también se acabarán.

Ruidos no molestos

Esta Nochevieja infinita que acabará el día de Reyes no parece molestar a los vecinos más próximos, los que residen en la capital manchega y en pueblos como Ballesteros de Calatrava, Poblete, Villar del Pozo o Corral de Calatrava. Los ecos de la música electrónica llegan a estos municipios de forma leve y sus vecinos prefieren tomárselo con humor: «Por la mañana podrían varear los olivos, porque estamos con la cosecha de aceituna, y por la tarde ir a la fiesta», sugieren algunos.