Así funciona la inteligencia artificial en radiología: «Un valor predictivo del 97 % es que de 200 placas, dudas en ocho»
SOCIEDAD
El Sergas ha implantado un sistema que analiza placas de tórax y abdomen y busca lesiones musculoesqueléticas, lo que permite liberar la carga de los profesionales para que se centren en los casos más urgentes
11 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.«Los radiólogos que trabajaban en urgencias estaban bombardeados por 350 estudios en una guardia, que era insoportable». Lo explica el jefe de radiología del CHUS, Roberto García Figueras. Eso, que «humanamente no era posible gestionar» hacía también perder la escala a los profesionales «para poder atender un escáner urgente, un politraumatizado, un código ictus...» Hasta que llegó la inteligencia artificial. Hace algo más de un año, el Sergas implantó un sistema de apoyo al diagnóstico en radiología, que hasta el momento ha analizado casi 370.000 estudios y que tiene un factor de predicción negativa del 97 %, o lo que es lo mismo: si el algoritmo dice que no hay lesión en la placa, es cierto en el 97 % de los casos.
La inteligencia artificial se utiliza en el Sergas para analizar placas de tórax y abdomen (por ejemplo, para diagnosticar neumonía) y hacer estudios musculoesqueléticos buscando lesiones, tanto en las urgencias como en preoperatorios y atención primaria. Se trata, explica el jefe de radiología del complejo hospitalario de Santiago, de un primer filtro, un apoyo para los profesionales. En ningún caso es un sustituto del médico. «Si yo a los profesionales los libero de la carga donde la probabilidad pretest de que tenga algo es bajísima, solo estoy evitando fatigas», explica.
Es decir, el uso de la IA es útil para descartar lesiones en aquellas pruebas que se piden de rutina o con baja sospecha de que pueda haber una lesión, con lo que el profesional puede entonces centrar sus esfuerzos en casos más graves. «Un valor predictivo del 97 % es que de doscientas placas, dudas en ocho».
La implantación de la inteligencia artificial arrancó en el Chuac en septiembre del 2023 y desde entonces ha analizado más de 78.000 estudios. En el área de Santiago, desde hace un años el algoritmo se ha utilizado en más de 150.000 estudios en urgencias y atención primaria, por poner un ejemplo. De ellos, el 52,5 % corresponden a diagnóstico de lesiones musculoesqueléticas. «Nos vale de filtro, pero es necesario que la otra parte de la ecuación —el médico— también trabaje», explica García Figueras.
En Vigo, está previsto implantarla ya en urgencias, pero se lleva usando desde mayo en primaria y en preoperatorio, mientras que en Ferrol, Lugo, Pontevedra y O Salnés se implantó el pasado mes de julio. El área sanitaria de Ourense utiliza inteligencia artificial en radiología desde el pasado mes de octubre.
El futuro, la integración
En medicina, el 70 % de los dispositivos basados en IA que se aprueban están dedicados a imagen médica, destaca el jefe de radiología del CHUS, que matiza, sin embargo, que la evolución de la inteligencia artificial está todavía en una etapa en la que «es unimodal. Es decir, interpreta un tipo de patrón determinado, con lo que es buena para tareas específicas» como la búsqueda de fracturas, y además no se cansa como una persona, pero no tiene la capacidad de enfrentarse a una imagen y diagnosticar cualquier cosa, como puede hacer un radiólogo.
El futuro en este ámbito, vaticina Roberto García Figueras, es la integración, tanto de los múltiples algoritmos como también del lago de datos que hay en el sector sanitario. Es decir, que se puedan cruzar diversas pruebas, como un escáner que muestre placas en la coronarias, el nivel de colesterol y la presión arterial para calcular el riesgo cardiovascular de un paciente y poner en marcha una serie de recomendaciones.