Seguirá su convalecencia durante al menos dos meses en su residencia de Santa Marta y tendrá que reaprender a hablar, ya que durante su hospitalización forzó los músculos respiratorios. Los médicos admiten que durante su ingreso tuvo dos episodios «en los que su vida corrió peligro»
22 mar 2025 . Actualizado a las 19:53 h.Fue un anuncio inesperado y por sorpresa. Después de 37 días ingresado en la clínica Gemelli de Roma por una infección respiratoria y una neumonía bilateral que hizo temer por su vida, el papa Francisco recibirá este domingo el alta hospitalaria, según anunciaron los médicos Sergio Alfieri y Matteo Bruni, que dirigen el equipo que se ha encargado del pontífice.
Pero que el pontífice sea dado de alta no significa que pueda volver a recupera su actividad habitual. La suya será un alta «protegida», lo que significara que deberá continuar con la convalecencia por un período de dos meses en su residencia de Santa Marta. Seguirá necesitando descanso y cuidados médicos.
Sergio Alfieri, responsable del equipo médico, destacó que durante este tiempo de convalecencia no podrá recibir a grupos de personas y que deberá limitar sus esfuerzos. Otra cosa es que el pontífice siga a rajatabla sus consejos, ya que, según el personal de confianza del pontífice, su deseo es retomar cuanto antes su actividad al frente de la Iglesia.

Entre otras cosas, tendrá que recuperar la confianza al hablar, ya que durante la enfermedad forzó los músculos respiratorios y en estos momentos tiene dificultad para hablar. Es lo que dijeron los médicos que lo atienden y lo que ya había avanzado el viernes el cardenal argentino Víctor Manuel Fernández, uno de los hombres de confianza de Jorge Bergoglio, quien dijo que tendrá «que casi volver a aprender a hablar».

«El Santo Padre nunca fue intubado, siempre estuvo alerta», pese a que hubo «dos episodios en los que su vida corrió peligro», según admitieron los médicos durante su comparecencia pública, en la que también explicaron que el papa hacía ya días que quería haber sido dado de alta, pero que finalmente optó por hacer caso al consejo de los profesionales que lo atienden. «Quería volver a casa hace días, pero nos escuchó», dijeron los especialistas del Gemelli.
Tal y como se había avanzado esta mañana, Francisco saldrá a la ventana del policlínico Gemelli para saludar a los fieles durante la misa del ángelus, desde el décimo piso del hospital, y una vez concluida la ceremonia será dado de alta y podrá regresar a su residencia en Sant Marta.