Entrevista | Carlos Carballo
07 ene 2004 . Actualizado a las 06:00 h.?arlos heredó de su padre la herrería en Esgos y la vocación de feriante. Ya de niño le acompañaba en la cita ourensana y ahora, con 30 años, sigue manteniendo entre su oferta de ferretería los aperos de labranza, aunque la demanda ha bajado mucho. -¿Se nota que el campo ya no es lo que era? -Mucho. Ahora apenas se venden estos artículos y los compradores son fundamentalmente gente mayor que sigue manteniendo alguna finca y trabajándola a su manera. -Pero la gente se arremolina ante el puesto... -Sí, muchos se paran a mirar y a comentar, pero porque les recuerda sus épocas de mozos o de niños. -¿Cuál ha sido en esta feria el protagonista? -En este tipo de artículos, las tijeras de poda porque estamos en la época. Luego en ferretería y menaje un poco de todo, aunque llevamos unos meses con poca venta en general y ahora que salimos de las fiestas, peor. -¿Le hacen encargos especiales? -Ocurre algunas veces con artículos como las barbacoas, parrillas y cosas así, porque necesiten una medida determinada y se lo preparamos en el taller, pero no es muy frecuente.