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¿Por qué la mayoría de los vuelcos de tractor no son accidentes laborales?

la voz REDACCIÓN

AGRICULTURA

RAMON LEIRO

Aunque su uso es agrícola, la mayor parte de los accidentes mortales que se producen en este tipo de vehículos no son clasificados como tal. La razón es que buena parte de las víctimas son jubilados. Prevenir la siniestrabilidad es una prioridad.

24 may 2019 . Actualizado a las 11:33 h.

No es el perfil habitual, pero esta semana un hombre de 35 años perdió la vida en la parroquia de Valeixe (A Cañiza) al precipitarse el tractor que conducía por un terraplén. Es la última víctima de un problema, los accidentes mortales de tractor, producto de una combinación de factores que van desde la antigüedad del parque al uso no adecuado de estas máquinas agrícolas. Lo más habitual, además, es que los que mueren sean personas jubiladas que realizan tareas en sus fincas. Esa es la razón de que la mayor parte no sean catalogados como accidentes laborales. Solo en torno al 6 % lo son. 

«Cando falamos dos accidentes de tractor hai que ter en conta unha cousa, que son máquinas para facer traballos agrícolas e son tareas que normalmente se fan en solitario. Ademáis os accidentes deste tipo adoitan producirse en lugares afastados dos centros de atención sanitaria», apuntan fuentes de Unións Agrarias especializadas en prevención laboral. Más allá de ese punto de partida, el escenario que se dibuja en Galicia en torno a este tipo de accidentes es que solo un 6 % son catalogados como accidentes laborales porque la mayoría afectan a jubilados que realizan labores esporádicas o de fin de semana en sus fincas. Además, muchas de esas personas no utilizan tractores con medidas de seguridad homologadas por tratarse de vehículos muy antiguos. «Moitos tamén os usan como medio de transporte, aínda que está prohibido levar xente neles. Pero tamén hai moita xente maior que saca peito cando di ``o meu tractor ten trinta anos´´», añaden desde Unións Agrarias. 

Precisamente son esos tractores más viejos los que conllevan un mayor riesgo por carecen de medidas de seguridad. De hecho, como apuntan desde el sector, algunos de los que se usan de vez en cuando para tareas esporádicas no han pasado ni la ITV. En un 47 % de los casos la razón del accidente es el vuelco, un riesgo que podría prevenirse con la utilización de una protección que cumpla la normativa. Desde una cabina a un arco, un pórtico o un bastidor. Las salidas de vía protagonizan el 15 % de los accidentes, mientras que otro 10 % son personas que quedan atrapadas por alguna parte del vehículo. Además, desde Unións Agrarias, hacen otra anotación: «A xente non ten unha formación específica no manexo desta maquinaria porque moitas veces non é únicamente manexar o tractor, son tódolos aperos que leva asociados e hai moito atropelo coa propia maquinaria». Y añaden que el hecho de que la mayor parte de la gente que trabaja en el campo sea autónoma hace que la aplicación de un plan de prevención de riesgos laborales sea más limitado. «Cando hai traballadores hai que cumprilo, pero cando un autónomo merca unha máquina nova, moitas veces mira o papel que trae instruccións daquela maneira», dicen. El reto ahora es frenar la accidentabilidad.