¿Para qué es mejor este tronco? XERA ayuda a la industria forestal a comprar el equipo para saber la respuesta

En el monte gallego se aprovecha todo. Pero la clave está en que esos aprovechamientos _desde la madera a los servicios ecosstémicos o los frutos_ dejen el mayor beneficio en el entorno de unos bosques que, en su gran mayoría, están en manos privadas. La industria forestal de primera y segunda transformación tiene mucho que decir en esa revalorización de los montes. De ahí que algunas de las líneas de las ayudas promovidas por la Axencia Galega da Indusrtia Forestal (XERA) para realizar inversiones en tecnologías forestales, procesamiento, movilización y comercialización de productos forestales, cofinanciadas con el Fondo Europeo Agrícola de Desenvolvemento Rural (Feader) en el marco del Programa de Desenvolvemento Rural de Galicia (PDR) que ayer fueron publicadas en el Diario Oficial de Galicia incidan en mejorar los procesos de trabajo en esas empresas. El ejemplo es la destinada a dar valor añadido a la primera transformación de la madera. ¿Pero cómo lo hará? Aportando subvenciones de hasta el 40% del valor de la inversión en equipos de diagnóstico de la calidad de la madera, tanto de los troncos que llegan a fábrica como de la materia prima trnsformada en productos serrados de carácter intermedio o final «mediante a aplicación de escáneres de imaxe, dimensionais, raios X e outros tipos». Fuentes del sector explican la función que realizarían unos equipos que estarán subvencionados por primera vez en esta convocatoria. Su función, por ejemplo, sería la de hacer un diagnóstico de cada tronco que entra en la empresa para saber cuál sería el mejor uso industrial de esa madera. Porque no toda materia prima vale para todo. 

Dentro de esa misma línea, según publica el DOG, también sufragarán la compra de equipos portátiles «para a clasificación estrutural da madeira por métodos non destrutivos, sempre que dispoñan de documentación/estudos para a análise das especies empregadas pola empresa». O para «maquinaria e instalacións de primeira transformación destinadas á clasificación automática da madeira estrutural mediante aspectos visuais ou indirectos. No caso de métodos indirectos, deberá disporse de documentación ou estudos para a análise das especies empregadas pola empresa». En ambos casos la empresa que opte a la ayuda deberá disponer de la marcación CE para madera estructural. En caso de no tenerla deberá estar en proceso de obtener el distintivo en el plazo de un año. 

Pero conscientes de que el monte es mucho más que madera, esta orden bianual de ayudas también dispone de líneas para castaña e resina o para biomasa. Lo que no se apoyará es la compra de maquinaria usada, ni tampoco maniobras de comercialización de productos en países no comunitarios.  

El tope de ayudas que podrá recibir cada empresa solicitante es de 200.000 euros. 

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