La Generalitat prepara una resolución para extender a todos los municipios de la comunidad las medidas de bioseguridad marcadas desde el Ministerio de Agricultura para prevenir los contagios en zonas de alto riesgo o áreas de especial vigilancia
11 ene 2022 . Actualizado a las 10:15 h.El hallazgo el pasado 22 de diciembre de cuatro cisnes y una cigüeña muertos _este lunes fueron detectadas otras trece aves muertas en el mismo lugar_ debido a infección por gripe aviar H5N1, una variante que no afecta a la salud humana, no solo han hecho desatar las alarmas en Cataluña, también en el resto de la Península. Porque aunque este lunes Cataluña mantenía todavía el estatus de libre de influenza aviar, sin restricciones al comercio de las aves de corral y sus productos, los focos detectados en explotaciones domésticas en el sur de Francia y Portugal estrechan el cerco sobre España. Es por ello por lo que el Gobierno de la Generalitat, según fuentes del departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, prepara una resolución como medida preventiva según la que se extrapolan las medidas de bioseguridad a todos los municipios de Cataluña, más allá de las zonas de riesgo.
«Esta resolución, que se firmará en los próximos días, estará vigente desde el día siguiente de la publicación hasta el 20 de abril, ya que es durante este período cuando el riesgo es más elevado debido a la mayor afluencia de aves migradas desde del norte de Europa», explican también. En base a ello, según el protocolo articulado por el Ministerio de Agricultura para las zonas de alto riesgo o zonas de especial vigilancia, durante este período quedará prohibida, entre otras cosas, la cría de aves de corral al aire libre.
Y qué pasa en aquellas granjas en extensivo dónde no puedan guarecer a sus gallinas, patos o pavos dentro de una nave. En ese caso, el protocolo establece que «cuando esto no sea posible, la autoridad competente podrá autorizar el mantenimiento de aves de corral al aire libre, mediante la colocación, si ello fuera posible, de telas pajareras o cualquier otro dispositivo que impida la entrada de aves silvestres». Pero para poder hacerlo añade otra condición: las aves deberán de alimentarse y beber «en el interior de las instalaciones o en un refugio que impida la llegada de aves silvestres y evite el contacto de estas con los alimentos o el agua destinados a las aves de corral».
La detección el pasado 2 de diciembre de un foco de gripe aviar en Palmela, al sur de Lisboa (Portugal) llevó al Ministerio de Agricultura a elevar el nivel de alerta alto de gripe aviar en todo el país. A finales del mes pasado, Portugal descubrió otro foco en una granja de pavos de Avarela, en Óbidos, más al norte. Ahora la presencia de un foco en aves silvestres en Lérida ha elevado el riesgo en España a muy alto.
Este tipo de medidas preventivas son ya habituales desde hace años, ya que la gripe aviar se ha convertido en una amenaza constante, sobre todo en épocas de migración de aves. Francia está investigando dos vacunas contra la enfermedad para no estar a expensas de lo que pueda afectar el virus a las granjas avícolas.