Alberto Cepeda: «El futuro será de la leche que no causa problemas gastrointestinales»
GANADERÍA
El catedrático del Campus Terra afirma que el consumo de leche A2 ya está presente y es favorable por las molestias que se evitan
26 ene 2024 . Actualizado a las 14:52 h.Es habitual leer o escuchar comentarios de personas que no toman leche por una incompatibilidad, sobre todo con la productos como la lactosa, que les produce problemas gastrointestinales. Sin embargo, que la situación cambie puede ser cuestión de tiempo. Alberto Cepeda, catedrático del Campus Terra (USC), pronunció en días pasados su discurso de ingreso como nuevo miembro de la Real Academia de Ciencias Veterinarias de Galicia, y analizó el problema de la leche A2 y de sus repercusiones en la salud humana.
«El futuro será de el de una leche que no causa problemas gastrointestinales», afirma. Empieza a haber en el mercado algunas que ya se ajustan a ese perfil, que está relacionado con los componentes del producto. En algunos países donde se empezó a comercializar esa nueva leche, el precio del litro era unos 20 céntimos más elevado. Aunque recalca que su visión de la cuestión es científica y no económica, Cepeda apunta que la estrategia de presentar con mayor precio un producto de valores superiores a otros ya existentes no es ninguna novedad. También recalca que Galicia y España son lugares en los que el consumo de leche es, además que una cuestión de nutrición, un asunto casi cultural y que así se podrá recuperar a personas que ahora toman leche de soja.
El origen de la situación, como explica este docente, viene de que la leche que se consume procede de animales que en su genética pueden tener dos tipos de beta-caseína. Se trata se una proteína que puede ser de dos clases, A1 y A2. Al ingerir la leche, se generan unas sustancias llamadas péptidos. Las investigaciones han descubierto que una parte de esas sustancias, las denominadas péptidos opioides, generan efectos gastrointestinales, neurológicos y cardiovasculares.
La disminución de esos problemas puede lograrse con el consumo de leche A2, puesto que se ha comprobado que a mayor presencia de esa sustancia, menos complicaciones en el organismo como hinchazón del vientre o diarrea. En las vacas, detalla Alberto Cepeda, hay presencia de A1 y A2 en porcentajes que varían según las razas: por ejemplo, en la frisona, muy presente en la ganadería de Galicia, hay un 35 % de A1, un 16 % de A2 y un 48 % de A2, mientras que la parda alpina, muy presente en Asturias y en Castilla y León, el porcentaje de A1 es del 60%.
La inseminación como baza
Cambiar ese porcentaje en las vacas frisonas, de cuya leche se abastece en gran medida el sector lácteo de Galicia y de España, tiene una vía que ya está en marcha: es necesario usar toros con proteína A2 para la inseminación, y ya hay, agrega, semen de ese tipo en el mercado. Para el nuevo académico, una de las ventajas de esa reposición en la cabaña ganadera es que la práctica «no tiene hoy un coste excesivo». Un problema para las industrias es que la leche A1 no puede estar en contacto con la A2 para no perder sus propiedades, por lo que la solución está en instalar cadenas de envasado separadas o en realizar una escrupulosa limpieza tras trabajar con una y antes de hacerlo con la otra.
Aunque las ventajas de la leche A2 parecen claras y ya se está usando semen de ese tipo en las granjas, hay otro detalle. Cepeda explica que la leche A1 tiene en principio mejores aptitudes para su uso en la elaboración de derivados lácteos como queso o yogur. De todos modos, recuerda este catedrático, «la leche A2, seguramente, es superior a la A1 en valores nutricionales».
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DE CERCA
Origen
Alberto Cepeda nació en Palencia en 1959.
Formación
Cursó la carrera de Farmacia en la Universidade de Santiago de Compostela (USC).
Trayectoria
Ejerce la docencia en Lugo ciudad desde finales de los ochenta. Actualmente da clases en la Facultade de Ciencias y en la de Veterinaria.