El ataque mortal de cinco perros a una mujer en Zamora abre el debate en Galicia: «Los mastines no son agresivos; los cruces, sí»
GANADERÍA
Las claves para saber cómo actuar ante perros sueltos que vigilan el ganado, según los expertos: evitar movimientos bruscos, gritos y contacto visual
27 oct 2023 . Actualizado a las 08:22 h.La muerte de una mujer de 27 años en Zamora tras sufrir el ataque de cinco perros que estaban con un rebaño de ovejas abre el debate en Galicia, una comunidad con más de 16.000 mastines inscritos en el Rexistro Galego de Identificación de Animais de Compañía (Regiac). Aunque la investigación por el trágico suceso continúa abierta, las autoridades explicaron en primera instancia que entre los perros implicados hay tres mastines y dos pastores leoneses, también llamados de carea leonés o perro de Aqueda. Además, había al menos dos cachorros de menos de un mes de una hembra pastor de carea.
Los mastines, explican veterinarios de Lugo, son animales afables y generalmente dóciles, mientras que los carea son guardianes y es habitual que desarrollen agresividad si no se socializan correctamente desde que son cachorros.
«Los perros deben estar controlados y que estén sueltos para la actividad de pastoreo puede dar pie a que campen a sus anchas. Hay mucha gente que no sabe gestionar el encontronazo con los animales», dice Rebeca, veterinaria del municipio lucense de Friol.
«La mayor parte de perros de las explotaciones ganaderas son cruces»
En la opinión de Rebeca el gran problema son los cruces: «La mayor parte de perros que se usan en las explotaciones ganaderas son mestizos cuya procedencia se desconoce». Corral explica que muchos acaban abandonados y, posteriormente, les cuesta mucho conseguir una adopción por el carácter que tienen y su gran tamaño.
«A los mastines hay que educarlos y deben tener su espacio, pero necesitan que el dueño trabaje con ellos porque son animales territoriales. Un perro de cierto tamaño no se puede educar como otro pequeño que vive dentro de casa», dice la profesional, que también apunta hacia las administraciones como responsables de activar mecanismos de control que regulen la tenencia de este tipo de animales.
Ante lo sucedido en Zamora, el presidente de la Asociación para la Conservación del Mastín Español Tradicional (Acmet), Chema Celaya, que precisamente estuvo hace unos días en Lugo para conocer los resultados de un estudio sobre los sistemas de protección más eficaces para evitar ataques de lobo en ganaderías gallegas, pide cautela a la hora de hablar de los mastines como responsables del ataque mortal, y coincide con Rebeca en decir que los cruces son una problemática a nivel nacional.
«Cuando se seleccionan animales para este tipo de función no solo hay que fijarse en la morfología, que debe ir acorde con el trabajo que desempeña el perro, también es necesario conocer el comportamiento. Si algo tienen los mastines es que son animales equilibrados y que saben discernir dónde está el peligro y un transeúnte no debe serlo», explica Chema.
Una normativa legal que regule el uso de este tipo de perros
El presidente de ACMET admite que por su tamaño, los mastines pueden asustar a deportistas, transeúntes o vecinos, pero hace especial hincapié en que su carácter es muy noble. «El problema es que si son cruces con razas de instinto más predador, sí pueden abalanzarse sobre la gente», precisa.
Por ello, desde la asociación, que nació en 2014 y lucha por instaurar un estándar que reúna las características que deben tener los mastines ganaderos, piden a las administraciones autonómicas medidas urgentes, entre las que proponen una normativa legal que regule el uso de este tipo de perros. Asimismo, piden que ayudas como las que estableció Galicia en la última PAC, vayan acompañadas de una serie de requisitos y exigencias.
«Cualquiera puede tener un perro cruzado con Kangal Turko, por ejemplo, que son mucho más agresivos. Nosotros estamos trabajando en un estudio morfoestructural del mastín ganadero que también nos desvelará las pautas de comportamiento que se deben tener en cuenta a la hora de seleccionar el animal», explica Chema.
Las directrices que reciben los ganaderos para introducir un mastín como método de protección frente al ataque de grandes carnívoros son, según la ACMET, las siguientes: «No requieren de una educación al uso, pero tienen que criarse con el ganado desde cachorros. El trato con el propietario debe ser mínimo, igual que el que tiene con una oveja o una vaca porque el perro debe sentirse uno más del rebaño».
El presidente de la entidad hace hincapié en que los mastines no tienen problemas de convivencia entre sí, ya que tienen una jerarquía establecida, «pero ante perros ajenos que pueden molestar al rebaño aparecen los problemas porque pueden confundirlos con depredadores y sacar a la luz su función de protector. Si el perro va con su dueño atado y pasa por un camino, no debería pasar nada», añade. Además, precisa que el ataque mortal a una joven de 27 años en Zamora tuvo lugar a 50 metros del rebaño, «por lo que quizá los animales no debían estar tan cerca de un camino público».
¿Qué hago si me encuentro con varios mastines que protegen un rebaño?
Las directrices para la población general que acceda a caminos en los que pueda haber mastines y ganado son las siguientes, tal y como confirman desde ACMET:
- No salir corriendo ni hacer movimientos bruscos
- Evitar el contacto visual con los mastines
- Si vas en bici, bájate y sigue a pie
- Evitar alimentarlos
- Localizar zonas de ganadería extensiva para evitar llevar perros sueltos o pasar en bicicleta
- Mantener la distancia con los mastines y con el rebaño
«Las soluciones para evitar sucesos como el de Zamora, que profundamente lamentamos, pasan por la coherencia. Todos debemos poner de nuestra parte: los ganaderos deben responsabilizarse del tipo de perro que tienen y los excursionistas tienen que entender que la labor de los mastines es beneficiosa para ellos mismos porque va de la mano de la ganadería extensiva, tan beneficiosa para el medio ambiente y para los propios animales. Además, no debemos perder de vista que los mastines son la medida preventiva natural más efectiva contra el ataque de lobo y otros predadores», concluyen desde ACMET.