Decenas de tractores se manifiestan ante la Muralla de Lugo en otra protesta: «Ninguén mira por nós»
GANADERÍA
La convocatoria muestra el rechazo a precios bajos y al exceso de burocracia
20 feb 2024 . Actualizado a las 18:31 h.Nueva tractorada este martes en el centro de Lugo ciudad. Decenas de tractores rodearon la Muralla de Lugo en una jornada de protesta simultánea en varios lugares de Galicia. Los vehículos se concentraron en los alrededores de la ciudad y llegaron a la ronda por la avenida da Coruña. Su recorrido acabó ante el multiusos de la Xunta, donde decenas de personas los esperaban desde antes del mediodía.
Los tractores empezaron, poco antes de la una del mediodía, a aparcar en la ronda da Muralla. Los primeros estaban estacionados junto a la Porta de San Fernando. Llegaron con los conductores haciendo sonar las bocinas y recibieron algunos aplausos. Pasadas las 13.20 horas de este martes, arrancó la manifestación en pleno centro de la ciudad, con la Muralla de fondo.
Una pancarta que portaban representantes de UU.AA., SLG y Asaga abrió la marcha por la Ronda. Frases como «Queremos vivir do noso traballo», «Sánchez, escoita: o campo está en loita» o «Menos burocracia e máis solucións» son coreadas en la protesta. La ganadera Ana Portomeñe fue la encargada de leer el manifiesto frente a la Subdelegación del Gobierno en Lugo, en Armanyà.
En la explanada situada ante el multiusos había ganaderos, sindicalistas y políticos: el BNG estuvo representado, por ejemplo, por las diputadas Olalla Rodil y Montse Valcárcel, por el teniente de alcalde lucense Rubén Arroxo y por el alcalde de Muras, Manuel Requeijo; el PSOE, por el regidor de Castroverde, Xosé María Arias, y el PP, el por el concejal lucense y diputado provincial Antonio Ameijide.
El regidor de Castroverde, ganadero de profesión, se mostró muy crítico con la Xunta. «Polo rural non se vai nada nin se vai facer», dijo. «Pídolle ao goberno galego que faga algo polo rural», demandó. Arias recorrió la marcha en cabeza, detrás de la pancarta que también portaban representantes sindicales, y dijo echar de menos a alcaldes del PP en un acto como el de este martes.
Precios mejores para la leche y para la carne
La demanda de mejores precios para la leche y la carne, el rechazo a una carga burocrática que se estima excesiva o la demanda de que la Política Agraria Común (PAC) se adapte a la realidad gallega son algunas de las demandas.
Esas cuestiones fueron explicadas por responsables sindicales antes del inicio de la manifestación. Xosé Ramón González (UU.AA) destacó la necesidad de que se cumpla la Ley de Cadena Alimentaria, que impide vender por debajo de los costes de producción, y reclamó la creación de un observatorio de precios. Por otro lado, reclamó una legislación más pegada al terreno: «Non se pode facer a PAC dende oficinas de Madrid, de Bruxelas ou mesmo de Santiago de Compostela», dijo.
Brais Álvarez (Sindicato Labrego Galego) pidió que se tuviese en cuenta la presencia de pequeños y medianos productores en el campo, no solo de grandes empresas, al elaborar, por ejemplo, criterios como los de la PAC. Juan Pérez (Asaga) recordó que las protestas abarcaban toda la cornisa cantábrica. Para Pérez, resulta inconcebible que se comente con sorpresa que los jóvenes se van del campo si crecen las trabas de todo tipo. «O rural necesita agricultores e gandeiros», afirma.
Mientras tanto, en Pedrafita do Cebreiro hay también decenas de tractores, situados entre las dos rotondas de la localidad.
Patricia Trigo, ganadera de Lugo: «Ninguén mira por nós»
Patricia Trigo, ganadera de la parroquia de Benade (Lugo), participó este martes en la protesta de la ciudad amurallada, en la que incluso leyó un manifiesto al final. Es hija y nieta de ganaderos, y asegura que este es un momento particularmente complicado. «A xente nova non quere saber nada do campo», asegura. Uno de los problemas que ve es que la Unión Europea impone condiciones de respeto ambiental y de bienestar animal, los mercados de los países reciben productos de otros en los que no hay esos controles. «É un pouco complicado», afirma.
El relevo generacional le parece difícil ahora, a pesar de que confiesa haber elegido la ganadería con total voluntad. «A xente que se vai xubilar está coa auga ao pescozo. Como se vai meter no campo a xente nova?», manifiesta. A esa sensación de pasar por un momento difícil, además, se le une la de vivir en un cierto desamparo: «Ninguén mira por nós. Está toda Europa na rúa. Creo que cando a xente se dea conta de que non hai campo, comeranse alimentos sen ningunha calidade», subrayaba.
Dolores Lenza, ganadera de Pol: «Non nos fan caso e ninguén fai nada»
Dolores Lenza, ganadera de Pol, se siente un poco abandonada y olvidada. «Non nos fan caso e ninguén fai nada, as empresas non respectan nada», decía a primeras horas de la tarde en la calle Armanyà, frente a la Subdelegación del Gobierno. Al final de la protesta, en sus palabras había una queja por considerar que la parte burocrática es cada vez mayor para los ganaderos: «Cada vez hai máis [burocracia]. Temos que controlar o que botamos nas nosas leiras. Control? Que o fagan eles. Se ven que nos pasamos, que o miren», explicaba.
Por otro lado, teme un próximo descenso del precio de la leche y que en abril se pague cinco céntimos menos. Con todo ello, agrega, el relevo generacional le parece cada vez más difícil: «Non hai quen siga. Aquí xa non hai nenos, así que...», decía. «Dende meus avós ata hoxe, é a mesma loita. Galicia é distinta a Andalucía. As leiras son diferentes, pero ninguén sabe nada. Terán moitos estudos, pero parece que en realidade ninguén sabe nada», aseguraba.