El Gobierno solo modificará la protección del lobo si así lo avalan el conocimiento y la ciencia
GANADERÍA
Argumenta que la Comisión Europea establece que se deberán mantener las poblaciones del cánido en un estado de conservación favorable y que solo si los datos contrastados evidencian una tendencia diferente se tomarían medidas
06 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.A priori, nada parece indicar que el Ministerio para la Transición Ecológica vaya a cambiar la postura que mantiene sobre la protección del lobo, un animal que incluyó hace solo unos años en el Listado de Especies en Régimen de Especial Protección (Lespre) por considerar que era una especie que no se encontraba en un estado de conservación favorable. Porque, a pesar de que el comité permanente del Convenio de Berna acaba de aprobar el cambio de esta especie de «estrictamente protegida» a simplemente «protegida», el Gobierno asegura que esta medida solo supondrá cambios en la legislación española si así lo avalan datos contrastados y evidencias científicas.
El ministerio sostiene que, a pesar del cambio que llevará a cabo la Comisión Europea, en España «la toma de decisiones sobre dicha regulación debe basarse en el conocimiento y la ciencia», argumentan fuentes de esta entidad. Esto significa que solo en el caso de que «los datos contrastados y evidencias científicas indicaran una tendencia diferente», España tomaría las medidas correspondientes. Precisamente de no seguir la evidencia científica es de lo que acusan las comunidades loberas, entre las que está Galicia, a Transición Ecológica. Pues estas argumentan que en sus territorios el estado de conservación de la especie es más que favorable, mientras que el ministerio alega lo contrario y por ello decidió aumentar la protección del lobo. «En Galicia temos mais lobos que en Francia e Portugal xuntos», se quejaba el pasado martes la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez.
Desde el Gobierno se recuerda que, tras la decisión del comité permanente del Convenio de Berna, el primer paso será esperar tres meses hasta que la enmienda entre en vigor, algo que sucederá el 7 de marzo del próximo año. Después, la UE podrá adaptar los anexos de la Directiva Hábitats, que regula la protección del lobo. «La Comisión ha declarado que propondrá una modificación legislativa específica, que deberá ser adoptada por el Parlamento Europeo y el Consejo», asegura el ministerio, que también explica que no existe todavía una previsión de plazos para este cambio.
Lo que el ministerio tiene claro es que esta modificación «dará mayor flexibilidad a los Estados miembros a la hora de gestionar sus poblaciones de lobo», argumenta. La especie, insiste, seguirá estando protegida y deberá contar con medidas de conservación y gestión que garanticen que su estado es favorable. Al mismo tiempo, recuerda Transición Ecológica, Europa también aconseja profundizar en la coexistencia entre lobo y ganadería, adaptando las medidas necesarias de prevención de daños para reducir la depredación del ganado. También se seguirán promoviendo medidas indemnizatorias por los daños que pueda ocasionar el cánido.
Estudio de las poblaciones
Por otro lado, desde el punto de vista de la investigación, la UE es partidaria de hacer un seguimiento detallado del estado de las poblaciones, de manera que se pueda determinar su evolución y si se encuentran en un estado de conservación favorable. Para ello, es necesario estandarizar y homogeneizar las técnicas de censo, para que puedan ser comparables entre los distintos territorios europeos. La Comisión también está dispuesta a seguir ayudando a los Estados miembro en el diseño y aplicación de medidas de conservación, a través de la financiación, para la cual se deben utilizar los instrumentos que existen en la Política Agraria Común (PAC).
Todo parece indicar que el ministerio no atenderá así las exigencias de comunidades como Galicia, que esta misma semana volvían a reclamar que se cambie el estatus de protección del lobo para permitir esperas y batidas en las zonas en las que el animal está provocando más ataques. Porque, según Vázquez, solo en lo que va año en Galicia han sido víctimas del cánido más de 3.300 cabezas de ganado. Los propios ganaderos lamentaban también la falta de medios que tienen para luchar contra este animal, que en algunas explotaciones de O Pino mató a una decena de vacas desde el pasado mes de septiembre. La última, el mismo día que Europa aprobaba cambiar la protección del lobo.