WWF derriba un mito: Las ganaderías gallegas en extensivo frenan el cambio climático

M. Cedrón REDACCIÓN

SOSTENIBILIDAD

ROI FERNÁNDEZ

La responsable del programa de alimentos de la oenegé en España, Celsa Peiteado, participó junto con la catedrática de Tecnologia de los Alimentos de la USC, Ángeles Romero, en un encuentro virtual sobre el nuevo modelo alimentario en Europa organizado para celebrar el aniversario de la Reserva de la Biosfera mariñas Coruñesas e Terras do Mandeo

15 jun 2020 . Actualizado a las 19:50 h.

«El modelo alimentario que tenemos que seguir es el saludable. En Europa o en cualquier otro lugar. Lo que tenemos que hacer es adaptarlo a cada zona. Educar sobre alimentación y adaptar ese modelo saludable a nuestros alimentos propios». Esa fue la respuesta que la catedrática de Tecnología de los Alimentos y directora de la Cátedra do Pan, Ángeles Romero, dio a la pregunta que planteaba el título del segundo encuentro virtual organizado por la Reserva de la Biosfera Mariñas Coruñesas e Terras do Mandeo, en colaboración con el Centro de Extensión Universitaria e Divulgación Ambiental de Galicia (Ceida), para conmemorar el séptimo aniversario de la entidad. En esa línea también giró el planteamiento de la responsable del programa de alimentos de WWF España y coordinadora del proyecto LiveWell for LIFE, Celsa Peiteado Morales, quien aclaró algunos de los malentendidos que se han extendido sobre el consumo de carne y que han metido en el mismo saco a la procedente de animales criados en intensivo con métodos de tipo industrial y la de aquellos que, por el contrario, crecen en granjas en extensivo donde los animales están al aire libre.

En línea con lo que recomienda la estrategia De la granja a la Mesa, promovida por la UE, dijo que «hay que comer menos carne, pero que la que comamos sea carne de calidad, procedente de ganadería extensiva. Esto es muy importante porque a la hora de buscar culpables del cambio climático se metió toda la producción ganadera en el mismo saco».

En este sentido, distinguió entre la ganadería industrial que tiene a los animales estabulados, «alimentados con soja importada de terceros países que, en muchos casos, causa problemas de deforestación en esos estados». Por otro lado está, como dijo, «un modelo totalmente diferente, que en Galicia conocéis muy bien, que es el de la ganadería extensiva, el de los rebaños en los campos. Esa cabaña ganadera que pasta y que contribuye a la lucha contra el cambio climático porque son esos pastos donde más CO2 se acumula en el terreno». Además, recordó «que no podemos permitirnos que desaparezca ese modelo de producción sostenible porque compite en el mercado con carne low cost».

Es por ello que la carne de calidad producida en esas ganaderías forma parte de esa dieta saludable que recomendó Ángeles Romero. Durante su intervención detalló precisamente cómo es ese tipo de alimentación. Y dio nueve claves: Ha de aportar todos los nutrientes que necesita una persona. Ha de adaptarse a las necesidades de cada individuo porque no todos tenemos las mismas características, no solo físicas, también sociales o culturales. Ha de ser suficiente tanto a nivel de macronutrientes como de micronutrientes. Tiene que ser también equilibrada. Ha de ser segura. Satisfactoria porque tiene que gustarnos lo que comemos. Pero además tiene que se asequible. Y como modelo citó el plato de Harvard, según el que el 50 % tiene que estar compuesto de fruta y vegetales; otro cuarto de hidratos de carbono, desde cereales (mejor que sean integrales, a pasta o arroz), mientras que el último cuarto restante ha de estar compuesto de proteína de calidad.

Pero fueron muchas más las cuestiones que salieron a relucir en este encuentro. Desde cómo el consumo de productos de temporada favorece al medio ambiente porque reduce la huella de carbono y, además, contribuye al desarrollo rural al promover a los productores locales. A detallar el trabajo que se realiza desde el proyecto LiveWell desde donde, entre otras cosas, se trata de mostrar cómo la alimentación puede contribuir a fomentar la biodiversidad y, por tanto, frenar las pandemias. En ese sentido, un ejemplo claro es el trabajo que se realiza desde la Cátedra do Pan con la recuperación de variedades de trigo autóctono o el fomento de la rotación de cultivos en los campos donde se produce la materia prima para elaborar un pan de masa madre propio de Galicia. Pero el foro que puede verse en Youtube da para mucho más.