Urgen cambiar la ley para dar más garantías a las comunidades de usuarios de traídas de agua
SOSTENIBILIDAD
Piden que estas agrupaciones puedan renovar sus concesiones pese a la existencia de red municipal para no perder su inversión
18 ago 2023 . Actualizado a las 10:24 h.Las comunidades de usuarios encargadas de gestionar las centenares de traídas de abastecimiento vecinal de agua que hay repartidas por toda Galicia necesitan tener más garantías jurídicas. Ese es el primer paso que hay que dar para, a juicio del portavoz de la Asociación de Traídas de Agua Rurales (Coxapo), Rafael Carrera, fomentar el registro y buena gestión de esas redes. Esa es la razón por la que, a partir de septiembre, esta asociación se reunirá con los distintos grupos políticos para promover un cambio de ley que dé a esas agrupaciones vecinales la confianza suficiente como para invertir en la mejora sus redes de traída sin temor a acabar perdiendo el dinero. Para ello, entre otras cosas, piden que las comunidades de usuarios de agua puedan renovar las concesiones que en su día les dieron los organismos de cuenca, independientemente de que pase o no una red municipal a menos de cien metros de sus casas.
Lo que está ocurriendo desde hace unos años, como explica Carrera, es que hay agrupaciones vecinales a las que no se les está renovando la concesión debido a la puesta en marcha de redes públicas en sus territorios cuya gestión se entrega posteriormente a entidades privadas. Las opciones que les quedan a los vecinos en esos casos es caer en la ilegalidad o conectarse a la red municipal pagando ellos toda la obra de enganche.
Más allá de eso, desde Coxapo también creen que es fundamental hacer una labor de formación en los concellos, muchos de los cuales no están bien informados de las normas que rodean el uso del agua, ni tienen medios técnicos ni económicos para desarrollar su función.
La responsabilidad del agua
En el caso concreto de las redes de abastecimiento vecinal, fundamentales para garantizar el abastecimiento de agua en un medio rural tan disperso como el gallego, el control y mantenimiento de la red es responsabilidad del titular, que son los vecinos. Lo que ocurre es que la responsabilidad sobre el agua que sale del grifo de la casa a la que suministra la red es del concello. Es decir, el gobierno local es el responsable de velar, por ejemplo, para que no se viertan nitratos cerca de la captación u otro material susceptible de contaminarla.
Aunque el abastecimiento, saneamiento y depuración del agua son competencias municipales, Augas de Galicia comenzó hace unos años a colaborar con los concellos para tratar de encaminar el asunto. En el 2021 lanzó una convocatoria para que todos aquellos municipios con interés en desarrollar un plan municipal de abastecimiento autónomo, en total colaboración con los vecinos, pudieran pedir la ayuda de la Xunta para su elaboración. El modelo a seguir es la guía elaborada en Abegondo en el marco del programa Life Rural Supplies. La convocatoria tuvo una respuesta relativa y, al final, fueron seleccionados media docena de ayuntamientos. Hace poco más de un mes fueron presentados los primeros datos a las comunidades que participaron en el estudio. Ahora hay que continuar. «No es fácil», reconocen desde la Administración.
Junto a esto, la Consellería de Infraestructuras e Mobilidade lleva convocando desde el 2020 una línea de ayudas para mejorar y modernizar los principales elementos de estas traídas vecinales y la compra de medios de medición del caudal. En las cuatro últimas convocatorias se han concedido 214 subvenciones e las que se han invertido más de dos millones de euros.
Desde la Xunta muestran voluntad de arreglar el problema y tienen una guía para hacerlo en la que escuchar a las comunidades de usuarios es fundamental. Pero el proceso parece que avanza lento.