«Sólo mía», una reflexión en la Seminci sobre los malos tratos

MIGUEL ANXO FERNANDEZ Enviado especial VALLADOLID

TELEVISIÓN

MARTA CACHO

27 oct 2001 . Actualizado a las 07:00 h.

Ayer comenzó el desfile de títulos que aspiran a la prestigiosa Espiga de Oro en la 46 Semana Internacional de Cine de Valladolid, un año más apostando fuertemente por la producción europea y al margen de Hollywood. Abrió la oferta, Sólo mía, ópera prima de Javier Balaguer y contundente alegato contra el maltrato a mujeres. No era tema fácil para un principiante que sin embargo lleva más de veinte años en la profesión, en parte por el riesgo a escorarse a cualquiera de ambos lados, al de la exageración o al de la blandura. Tres años para preparar un guión muy cargado de buenas intenciones, pero que a ratos se muestra en exceso reiterativo. El marido, Sergi López, en realidad es un psicópata, y su esposa, voluntariosa Paz Vega, quizá inadecuada para el papel por bella de más. Un brochazo de humor grueso en la secuencia final, descoloca las motivaciones reales del film: denunciar una situación que nuestra sociedad no da corregido. Al plantear dos niveles en la estructura narrativa, uno en blanco y negro para mostrar la otra cara de la moneda con la esposa como verdugo, la película pasa al nível de ejercicio plástico quizá contradictoria con el realismo que preside el conjunto de la trama. Tal cosa no rebaja su notabilidad. Debería ser de visión obligada a quienes tienen a sus esposas por dramáticos sparrings. La alternativa visual y un guión que demuestra la falsedad de quienes aseguran que el western está muerto, son dos de las claves de Tle Claim, ambiciosa producción del británico Michael Winterbottom, filmado bajo temperaduras polares en la región canadiense de Alberta, para la ocasión la California de la fiebre del oro de mediado el XIX. Con una fotografía que apuesta por colores insólitos del que se desterraron rojos, amarillos o naranjas, un uso del scope y la planificación igualmente insólitos, el autor de Jude o Wonderland, recrea la historia de un cacique local. Destacar tambien que en la seccción de cortometrajes participa a concurso la gallega O río ten mans, dirigida por Beatríz del Monte con producción de Antón Reixa y que ya había obtenido numerosos premios Agapi en su pasada edición.