«Documentos TV» vuelve a emitir hoy el documental sobre la droga en Vilanova

JOSÉ PRIETO MADRID

TELEVISIÓN

«Marea blanca» cuenta como un pueblo ha perdido una generación a causa de la drogadicción El programa «Documentos TV», de la segunda cadena de Televisión Española, vuelve a emitir esta noche, a las 23.40 horas, el documental titulado «Marea blanca», que cuenta la historia de un pueblo gallego, Vilanova de Arousa, que perdió toda una generación de jóvenes a causa de los problemas de drogadicción.

12 feb 2002 . Actualizado a las 06:00 h.

El documental Marea blanca acaba de recibir el premio Reina Sofía de Medios de Comunicación Contra las Drogas, que anualmente entrega la fundación de la Cruz Roja dedicada a las toxicomanías. Con un guión de Joaquín Pedrido y Miguel Ángel González, el documental muestra la tragedia que desde hace décadas sobrevuela Vilanova de Arousa, un lugar prácticamente sin jóvenes porque una generación entera reposa, destruida por las drogas, en un cementerio frente al mar. El argumento de Marea blanca es la historia de la división de un pueblo, que desde siempre ha vivido de la pesca, entre narcotraficantes y drogadictos; una historia de familias destrozadas por la droga. El reportaje parte de una fotografía tomada en el verano de 1982 y la que aparece un equipo de fútbol de chavales de Vilanova de Arousa que ganó un torneo de fútbol. Curiosamente, aquel conjunto se llamaba Dejadnos vivir, un nombre que en la actualidad suena a grito de auxilio puesto que hoy día, de aquel equipo sólo quedan vivos cuatro componentes ya que el resto de hundió a causa de la marea blanca de la droga. Se recogen también en el documental las declaraciones de Manuel Fernández Padín, un hombre que desde hace más de una década vive en algún lugar, protegido las 24 horas del día por la policía. Narcotraficante arrepentido, fue el principal testigo del caso Nécora, que en 1994 encarceló a los principales capos gallegos de la cocaína. Cinco años después, todos están en libertad excepto el propio Padín, que sabe que nunca podrá volver a su tierra.