
Dibujos y letras hechos con plantillas se han incorporado al lenguaje de la publicidad Relacionado con una visión del arte democratizadora, los «stencils» salpican las calles
14 mar 2004 . Actualizado a las 06:00 h.Se ven desde hace algunos años en las calles de cualquier ciudad, pero su presencia se ha incrementado en los últimos meses. Son dibujos fijados a paredes o vallas con pintura en aerosol, cuyos contornos se definen por una plantilla que su creador ha utilizado para dar forma a un rostro o una frase. Los estarcidos, stencils , como se denominan en inglés y término que también ha hecho fortuna en español, viven un alza como la forma de expresión favorita de muchos artistas urbanos y callejeros. Muchos recurren a este estilo como método rápido y eficaz para difundir en público consignas, frases ingeniosas o retratos cargados de ironía, dando una nueva vuelta de tuerca a las exprexiones artísticas urbanas. Se cree que los primeros en practicar esta técnica fueron los habitantes de las cavernas: las pinturas rupestres son el resultado de aplicar polvo pigmentado sobre una superficie a través de una plantilla. En Oriente adquirió categoría de arte y se utilizó sobre todo en ropajes. Actualmente, el estarcido es una fórmula muy socorrida para decorar una vivienda con cenefas caseras, pero, en otras manos, se ha convertido en un medio asequible para expresarse. Así lo entendió el movimiento punk: el grupo musical The Clash incorporaron a su imagen sus postulados en estarcido sobre su propia vestimenta. Al servicio de las ideas De hecho, los stencil participan de esa idea democratizadora del arte: el estarcido es un medio que permite dominar fácilmente una técnica, que se pone al servicio de la difusión de las ideas. Por otra, parte, mantiene estrechos vínculos con el pop art , ya que la reproducción en serie, que tan famoso hizo a Andy Warhol, está en su esencia. La irrupción de los formatos digitales, que están poniendo al alcance de muchos las posibilidades de hacer cine, fotografía y música, también han acercado el estarcido a muchos. El software de tratamiento de imagen simplifica la elaboración de las plantillas, lo que permite también crear stencils con más de una capa de color. Lo que no han podido cambiar es su carácter ilegal: pintar sobre una superficie pública o privada sin permiso es delito, algo de lo que también saben mucho los grafiteros. En todo caso, la publicidad ha comenzado a apropiarse del lenguaje del estarcido. Un fabricante de coches ha recurrido a fórmulas basadas en el stencil para anunciar uno de sus modelos, y así lo identifica con un estilo joven y a la última, el público al que se dirige.