
El mando global | La otra vuelta de tuerca de los «reality» Endemol construyó un pueblo de cinco mil metros cuadrados en Colonia y en él viven de forma voluntaria quince concursantes divididos en clases sociales
13 mar 2005 . Actualizado a las 06:00 h.Ponga en una coctelera un buen chorro de Gran Hermano, un poco de La Granja , añada la película protagonizada por Jim Carrey El Show de Truman , agite bien y obtendrá Gran Hermano. El pueblo . La nueva versión del programa de Endemol, que el pasado día 1 estrenó en Alemania la cadena privada de televisión RTL2, también se ofrece en directo las 24 horas del día por el canal de pago Premiere. Consciente del dicho «renovarse o morir», Endemol ha dado otra vuelta de tuerca a su polémico reality show y cambiado las coordenadas de tiempo y espacio del programa. A diferencia de ediciones anteriores, esta nueva edición no tendrá fin. Será «un Gran Hermano eterno», según RTL2. Eso sí, los concursantes podrán abandonar el programa voluntariamente en todo momento. El concurso además no estará limitado por las paredes de una casa, sino por las fronteras de un pueblo que han construido expresamente en Colonia-Ossendorf, en el oeste de Alemania. Con una superficie de 4.925 metros cuadrados y una capacidad para albergar hasta quince concursantes de los 26.000 que se presentaron al cásting , el pueblo de Gran Hermano esta controlado las 24 horas del día por 100 cámaras de televisión y 60 micrófonos. Tiene una plaza central, tres casas en las que viven los concursantes según la clase social a la que pertenezcan, un bar, un gimnasio, dos salas de juego, un taller de coches, un taller de moda y una pequeña granja. Ricos y pobres Los concursantes están divididos en tres clases: rica, media y pobre. En función de la clase social, son jefes, asistentes o peones. Mientras los pobres se tienen que lavar en un barreño de metal y viven en una casa espartana con aspecto de cárcel, los ricos disfrutan en su casa de toda clase de lujos, desde jacuzzi hasta chimenea e incluso un jardín con piscina. El público determina el ascenso o descenso social. Pero también dependerá de los propios concursantes. Por ejemplo, un jefe podrá ser «degradado» a peón si su equipo no logra cumplir los objetivos fijados por el programa. Y, por supuesto, no faltarán las nominaciones para determinar qué concursante debe abandonar el pueblo. Gran Hermano. El pueblo recuerda a El Show de Truman , la película de Peter Weir protagonizada por Jim Carrey. Pero a diferencia de Truman, que descubre un buen día que toda su vida es una farsa televisiva, los concursantes participan voluntariamente en el concurso de televisión. En «el pueblo de Gran Hermano» los concursantes buscan fama, dinero o salir de una vida monótona. La rusa Anna, por ejemplo, sueña con relanzar su carrera como modelo. La argentina Juanita, a la que ya apodan «la bestia latina», exhibe su exuberante cuerpo sin pudor ante las cámaras. El tiempo dirá si la relación entre Gina y Norman saldrá adelante. Pero de momento esta pareja ha sido rápida. Han batido el récord en una edición alemana de Gran Hermano : tener relaciones sexuales en el sexto día de programa.