Tres condenados por el robo de «El grito» de Munch, que sigue desaparecido
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El tribunal de Oslo condenó ayer a tres hombres a entre cuatro y ocho años de cárcel por su implicación en el robo de un museo de la obra maestra de Edvard Munch El grito , que sigue desaparecida. Dos de los tres acusados han sido condenados también a pagar «en dos semanas» 750 millones de coronas noruegas (unos 96,4 millones de euros) por daños. El 22 de agosto del 2004, dos hombres armados y encapuchados penetraron en pleno día en el Museo de Munch de Oslo y amenazaron a un miembro del personal con una pistola ante la mirada atónita de los turistas y se llevaron El grito y la Madonna , otra de las célebres obras del pintor noruego, en un coche robado. El conductor Los condenados son Petter Tharaldsen (8 años de cárcel) por conducir el vehículo utilizado en la fuga, Bjoern Hoen (7 años), uno de los organizadores del robo a mano armada, y Petter Rosenvinge (4 años) por complicidad. Éste habría proporcionado el Audi utilizado en la fuga. Tharaldsen y Hoen han sido condenados a pagar una indemnización, que el fiscal ha pedido que fuera muy alta para empujar a los sospechosos a revelar el lugar donde se encuentran escondidos los cuadros. El destino de las dos obras sigue siendo un misterio pese a la investigación internacional y a los 2 millones de coronas (unos 250.000 euros) ofrecidos por la alcaldía de Oslo, propietaria de la colección Munch, para quien ofrezca información sobre su paradero. Absueltos Otros sospechosos han sido absueltos, incluido un hombre del que la policía sospecha que es uno de los dos autores del robo a mano armada. El fallo también constata que los autores del robo siguen en libertad. Las condenas pronunciadas son inferiores a las que reclamaba la acusación. El fiscal de Estado Terje Nyboe pidió 10 años de cárcel para Tharaldsen, 11 años para Hoen y 9 para Rosenvinge.